Un grupo de voluntarios de Protección Civil ha decidido cesar su actividad en "protesta" por sus "desencuentros" con el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Montilla. Según han detallado a Montilla Digital varios integrantes de la Agrupación, el origen del conflicto se remontaría al mes de abril de 2021, coincidiendo con el inicio de las obras de adecuación de Envidarte como un nuevo espacio escénico para la ciudad.
Las actuaciones, que contaron con un presupuesto de 1,5 millones de euros, obligaron a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil a abandonar su sede, ubicada hasta entonces en las antiguas naves de Ciatesa, un espacio que, según han detallado a este periódico las mismas fuentes, "no era un mero espacio de almacenaje, sino un punto de encuentro y convivencia", con sala de estar, vestuarios, salón de actos, zona común, almacén y área para los vehículos.
Tras su salida de Envidarte, el Ayuntamiento de Montilla ofreció a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil un emplazamiento provisional en el Centro Municipal de Iniciativas Empresariales (CIE), situado en el polígono industrial Llanos de Jarata, frente a las instalaciones de Carrier.
Sin embargo, la falta de avances en la concesión de una sede definitiva y la "ausencia de respuesta" por parte del equipo de gobierno han desembocado en una crisis interna que ha llevado, incluso, a la dimisión de varios de sus integrantes, mientras que otros se encontrarían a la espera de conocer las medidas que pueda adoptar el Consistorio, que ha previsto celebrar una nueva reunión en las próximas semanas para abordar esta situación.
Las mismas fuentes sostienen que la situación se volvió más tensa en mayo del pasado año, cuando varios voluntarios presentaron su dimisión por “falta de entendimiento” con el teniente de alcalde de Desarrollo Local y Seguridad, Valeriano Rosales, quien tiene delegadas las competencias de Protección Civil.
Tras reunirse en el mes de julio con el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, los miembros de Protección Civil mantuvieron algunos servicios “como muestra de buena voluntad”, además de tramitar la solicitud de algunas subvenciones “para que no se perdiera el dinero”, lo que, a juicio de los voluntarios, “conlleva tiempo invertido para poder hacer las gestiones”.
Sin embargo, las mismas fuentes aseguran que esa buena disposición mostrada durante meses “no fue correspondida” con avances reales. “Llegamos hasta el pasado mes de abril sin respuesta alguna por parte del equipo de gobierno”, comentan los voluntarios.
El punto de inflexión llegó —siempre según los testimonios recabados por este periódico— durante la pasada Semana Santa. “Ante la falta de agentes de Policía Local, el alcalde se dirigió a nosotros justo antes del inicio de la Semana Santa para que prestásemos algunos servicios, pero se encontró con la negativa de la gran mayoría de voluntarios”, detallan las mismas fuentes.
Y, a partir de entonces, las relaciones se habrían deteriorado “aún más”, a juicio de los voluntarios, que aseguran que el regidor montillano volvió a contactar con la jefatura de Protección Civil para abordar el emplazamiento de la futura sede. Sin embargo, sostienen, “a día de hoy, seguimos en las mismas: falsas promesas y, por eso, seguimos plantados”.
Los voluntarios insisten en que no han prestado servicios en eventos destacados del municipio, como la pasada Feria en honor a San Francisco Solano, la Fiesta de la Vendimia Montilla-Moriles o diversas procesiones ordinarias o extraordinarias que han tenido lugar en los últimos meses.
A pesar de ello, subrayan que su compromiso con la ciudadanía se mantiene intacto. “Aunque ya no atendemos servicios cotidianos, si se produjera alguna situación de emergencia grave o alguna catástrofe, como una inundación u otro apagón eléctrico, los voluntarios seríamos los primeros en ponernos el uniforme y salir a la calle a ayudar a nuestros vecinos”, afirma uno de los miembros de la Agrupación que, al igual que el resto de voluntarios que han contactado con este periódico, ha preferido mantenerse en el anonimato.
Según ha podido saber Montilla Digital, el pasado 29 de septiembre, el alcalde y la jefatura de Protección Civil volvieron a reunirse para abordar la situación de la nueva sede. Tras descartarse emplazamientos como el antiguo matadero municipal —ubicado en el polígono de Las Canteras de Santa María— o la sede de la Asamblea Local de Cruz Roja Española, el Ayuntamiento baraja otros emplazamientos como centro de operaciones de Protección Civil.
"El problema de fondo es, en realidad, la falta de voluntarios, ya que el personal estaba sobrecargado de servicios", reconoció a este periódico otra fuente de la propia Agrupación, que contaría en la actualidad con alrededor de una veintena de efectivos.
"Después de Semana Santa se han incorporado nuevos voluntarios, pero todavía no han podido prestar ningún servicio por la situación de incertidumbre que se está viviendo", reconoció esta misma fuente, para asegurar, a continuación, que "existen personas dispuestas a tomar las riendas de la Agrupación".
Con el conflicto aún abierto, el futuro de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Montilla permanece en el aire. El grupo de voluntarios críticos con la situación actual asegura que su objetivo no es otro que el de "recuperar un espacio digno" para desarrollar su labor y mantener el espíritu de servicio que, durante años, los ha caracterizado. Sin embargo, lamentan que "las promesas incumplidas" y "la falta de comunicación" con el equipo de gobierno hayan sumido la entidad en la incertidumbre.
Por su parte, el equipo de gobierno ha reiterado su compromiso y su reconocimiento hacia la labor que prestan los voluntarios de Protección Civil. El propio Valeriano Rosales hizo hincapié, en declaraciones a Montilla Digital, que el objetivo de la Delegación de Seguridad no es otro que el de "reactivar" la Agrupación.
El edil montillano reconoció a este periódico que este desencuentro tiene su origen en la salida de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de su sede de Envidarte. Sin embargo, según Valeriano Rosales, "el equipo de gobierno no entendía que la ubicación de la sede fuera motivo para que algunos voluntarios se desactivaran, sobre todo si el nuevo emplazamiento cuenta con espacios y recursos acordes a lo que necesita la Agrupación".
En ese sentido, y a pesar de que el equipo de gobierno defiende que "el servicio se puede prestar de forma similar en el espacio que se les asignó", continúan trabajando en la búsqueda de una sede definitiva. De hecho, el Ayuntamiento de Montilla estudia con el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) la posibilidad de ubicar la sede de Protección Civil en un edificio del entorno de la estación de trenes que, en caso de que fuera aceptado, requeriría en todo caso unas obras de adaptación previas.
Sea como fuere, Valeriano Rosales quiso hacer hincapié en que la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil "está ampliamente dotada, tanto de material como de vehículos", ya que "es mucho el dinero que se viene invirtiendo por el Ayuntamiento, en colaboración con otras Administraciones". Del mismo modo, el edil reconoció que los voluntarios "han trabajado bien en todo aquello que Montilla ha necesitado", por lo que confía encauzar la situación a la mayor brevedad.
Las actuaciones, que contaron con un presupuesto de 1,5 millones de euros, obligaron a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil a abandonar su sede, ubicada hasta entonces en las antiguas naves de Ciatesa, un espacio que, según han detallado a este periódico las mismas fuentes, "no era un mero espacio de almacenaje, sino un punto de encuentro y convivencia", con sala de estar, vestuarios, salón de actos, zona común, almacén y área para los vehículos.
Tras su salida de Envidarte, el Ayuntamiento de Montilla ofreció a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil un emplazamiento provisional en el Centro Municipal de Iniciativas Empresariales (CIE), situado en el polígono industrial Llanos de Jarata, frente a las instalaciones de Carrier.
Sin embargo, la falta de avances en la concesión de una sede definitiva y la "ausencia de respuesta" por parte del equipo de gobierno han desembocado en una crisis interna que ha llevado, incluso, a la dimisión de varios de sus integrantes, mientras que otros se encontrarían a la espera de conocer las medidas que pueda adoptar el Consistorio, que ha previsto celebrar una nueva reunión en las próximas semanas para abordar esta situación.
Las mismas fuentes sostienen que la situación se volvió más tensa en mayo del pasado año, cuando varios voluntarios presentaron su dimisión por “falta de entendimiento” con el teniente de alcalde de Desarrollo Local y Seguridad, Valeriano Rosales, quien tiene delegadas las competencias de Protección Civil.
Tras reunirse en el mes de julio con el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, los miembros de Protección Civil mantuvieron algunos servicios “como muestra de buena voluntad”, además de tramitar la solicitud de algunas subvenciones “para que no se perdiera el dinero”, lo que, a juicio de los voluntarios, “conlleva tiempo invertido para poder hacer las gestiones”.
Sin embargo, las mismas fuentes aseguran que esa buena disposición mostrada durante meses “no fue correspondida” con avances reales. “Llegamos hasta el pasado mes de abril sin respuesta alguna por parte del equipo de gobierno”, comentan los voluntarios.
El punto de inflexión llegó —siempre según los testimonios recabados por este periódico— durante la pasada Semana Santa. “Ante la falta de agentes de Policía Local, el alcalde se dirigió a nosotros justo antes del inicio de la Semana Santa para que prestásemos algunos servicios, pero se encontró con la negativa de la gran mayoría de voluntarios”, detallan las mismas fuentes.
Y, a partir de entonces, las relaciones se habrían deteriorado “aún más”, a juicio de los voluntarios, que aseguran que el regidor montillano volvió a contactar con la jefatura de Protección Civil para abordar el emplazamiento de la futura sede. Sin embargo, sostienen, “a día de hoy, seguimos en las mismas: falsas promesas y, por eso, seguimos plantados”.
Los voluntarios insisten en que no han prestado servicios en eventos destacados del municipio, como la pasada Feria en honor a San Francisco Solano, la Fiesta de la Vendimia Montilla-Moriles o diversas procesiones ordinarias o extraordinarias que han tenido lugar en los últimos meses.
A pesar de ello, subrayan que su compromiso con la ciudadanía se mantiene intacto. “Aunque ya no atendemos servicios cotidianos, si se produjera alguna situación de emergencia grave o alguna catástrofe, como una inundación u otro apagón eléctrico, los voluntarios seríamos los primeros en ponernos el uniforme y salir a la calle a ayudar a nuestros vecinos”, afirma uno de los miembros de la Agrupación que, al igual que el resto de voluntarios que han contactado con este periódico, ha preferido mantenerse en el anonimato.
Según ha podido saber Montilla Digital, el pasado 29 de septiembre, el alcalde y la jefatura de Protección Civil volvieron a reunirse para abordar la situación de la nueva sede. Tras descartarse emplazamientos como el antiguo matadero municipal —ubicado en el polígono de Las Canteras de Santa María— o la sede de la Asamblea Local de Cruz Roja Española, el Ayuntamiento baraja otros emplazamientos como centro de operaciones de Protección Civil.
"El problema de fondo es, en realidad, la falta de voluntarios, ya que el personal estaba sobrecargado de servicios", reconoció a este periódico otra fuente de la propia Agrupación, que contaría en la actualidad con alrededor de una veintena de efectivos.
"Después de Semana Santa se han incorporado nuevos voluntarios, pero todavía no han podido prestar ningún servicio por la situación de incertidumbre que se está viviendo", reconoció esta misma fuente, para asegurar, a continuación, que "existen personas dispuestas a tomar las riendas de la Agrupación".
Con el conflicto aún abierto, el futuro de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Montilla permanece en el aire. El grupo de voluntarios críticos con la situación actual asegura que su objetivo no es otro que el de "recuperar un espacio digno" para desarrollar su labor y mantener el espíritu de servicio que, durante años, los ha caracterizado. Sin embargo, lamentan que "las promesas incumplidas" y "la falta de comunicación" con el equipo de gobierno hayan sumido la entidad en la incertidumbre.
"Mano tendida" del equipo de gobierno
Por su parte, el equipo de gobierno ha reiterado su compromiso y su reconocimiento hacia la labor que prestan los voluntarios de Protección Civil. El propio Valeriano Rosales hizo hincapié, en declaraciones a Montilla Digital, que el objetivo de la Delegación de Seguridad no es otro que el de "reactivar" la Agrupación.
El edil montillano reconoció a este periódico que este desencuentro tiene su origen en la salida de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de su sede de Envidarte. Sin embargo, según Valeriano Rosales, "el equipo de gobierno no entendía que la ubicación de la sede fuera motivo para que algunos voluntarios se desactivaran, sobre todo si el nuevo emplazamiento cuenta con espacios y recursos acordes a lo que necesita la Agrupación".
En ese sentido, y a pesar de que el equipo de gobierno defiende que "el servicio se puede prestar de forma similar en el espacio que se les asignó", continúan trabajando en la búsqueda de una sede definitiva. De hecho, el Ayuntamiento de Montilla estudia con el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) la posibilidad de ubicar la sede de Protección Civil en un edificio del entorno de la estación de trenes que, en caso de que fuera aceptado, requeriría en todo caso unas obras de adaptación previas.
Sea como fuere, Valeriano Rosales quiso hacer hincapié en que la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil "está ampliamente dotada, tanto de material como de vehículos", ya que "es mucho el dinero que se viene invirtiendo por el Ayuntamiento, en colaboración con otras Administraciones". Del mismo modo, el edil reconoció que los voluntarios "han trabajado bien en todo aquello que Montilla ha necesitado", por lo que confía encauzar la situación a la mayor brevedad.
JUAN PABLO BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)















































