La Oficina Municipal de Turismo de Montilla, ubicada en el recinto del castillo de El Gran Capitán, acogerá hasta el próximo 10 de junio una exposición fotográfica sobre el alzacola rojizo, un ave en peligro de extinción que tiene una especial relevancia en la zona Montilla-Moriles y que fue proclamada Ave del Año 2022 por el colectivo SEO/Bird Life.
La inauguración de la muestra tendrá lugar esta tarde, a las 19.45 de la tarde y, a continuación, se celebrará una mesa redonda sobre esta especie, también conocida como "colitajara", en la que participarán la Fundación Social Universal (FSU), Harmusch Asociación de Estudio y Conservación de Fauna, la Asociación de Fotógrafos de Naturaleza (Fonacor) y SEO-Córdoba.
Desde mediados del pasado año, un proyecto impulsado por la FSU trata de proteger el hábitat de los alzacolas rojizos. La iniciativa, que cuenta con el respaldo del Ayuntamiento de Montilla, pretende conformar y capacitar a un grupo de voluntarios ambientales «que estén sensibilizados con el medio ambiente y con la protección de la biodiversidad» y que «se comprometan en el estudio del hábitat de esta ave», considerada «visitante estival» y reproductora en la Península entre mayo y septiembre.
El alzacola rojizo es una especie muy ligada al viñedo tradicional y, en menor medida, al olivar tradicional. Se trata de un ave migratoria que en España solo aparece durante la época reproductora, preferentemente en cultivos leñosos de la mitad sur del país, en áreas de clima seco y cálido. A través de esta especie se podrá difundir y dar a conocer la importancia de estos cultivos leñosos tradicionales, la necesidad de frenar su declive y su potencial para conservar y recuperar biodiversidad.
En el censo de 2020, se estimaba una población de alzacola rojizo en Córdoba de 2.766 individuos. Se trata de una población de mayor interés respecto al total, pues ocupa el tercer lugar en importancia numérica y acumula un 16,23 por ciento de la población española.
De este modo, este ave se distribuye en cuatro áreas de la provincia principalmente: occidental (Fuente Palmera, Peñalosa, Guadalcázar, Fuencubierta, y La Carlota), sur (Aguilar de La Frontera, Moriles, Monturque y Puente Genil), central (Fernán Núñez, La Rambla, Montilla y alrededores de Córdoba), y oriental (Espejo y Castro del Río).
El alzacola rojizo –conocido en la provincia como "colitajara", "regarsa" o "abaniquero"– presenta como principales amenazas los cambios en la forma de explotación de cultivos tradicionales, el abandono de cultivos usados como hábitat, el uso desmesurado de productos fitosanitarios, la expansión urbano disperso, la proliferación de depredadores oportunistas, los proyectos de plantas fotovoltaicas, la insuficiente protección de sus núcleos poblacionales y el cambio de las condiciones en áreas e invernada.
La inauguración de la muestra tendrá lugar esta tarde, a las 19.45 de la tarde y, a continuación, se celebrará una mesa redonda sobre esta especie, también conocida como "colitajara", en la que participarán la Fundación Social Universal (FSU), Harmusch Asociación de Estudio y Conservación de Fauna, la Asociación de Fotógrafos de Naturaleza (Fonacor) y SEO-Córdoba.
Desde mediados del pasado año, un proyecto impulsado por la FSU trata de proteger el hábitat de los alzacolas rojizos. La iniciativa, que cuenta con el respaldo del Ayuntamiento de Montilla, pretende conformar y capacitar a un grupo de voluntarios ambientales «que estén sensibilizados con el medio ambiente y con la protección de la biodiversidad» y que «se comprometan en el estudio del hábitat de esta ave», considerada «visitante estival» y reproductora en la Península entre mayo y septiembre.
El alzacola rojizo es una especie muy ligada al viñedo tradicional y, en menor medida, al olivar tradicional. Se trata de un ave migratoria que en España solo aparece durante la época reproductora, preferentemente en cultivos leñosos de la mitad sur del país, en áreas de clima seco y cálido. A través de esta especie se podrá difundir y dar a conocer la importancia de estos cultivos leñosos tradicionales, la necesidad de frenar su declive y su potencial para conservar y recuperar biodiversidad.
En el censo de 2020, se estimaba una población de alzacola rojizo en Córdoba de 2.766 individuos. Se trata de una población de mayor interés respecto al total, pues ocupa el tercer lugar en importancia numérica y acumula un 16,23 por ciento de la población española.
De este modo, este ave se distribuye en cuatro áreas de la provincia principalmente: occidental (Fuente Palmera, Peñalosa, Guadalcázar, Fuencubierta, y La Carlota), sur (Aguilar de La Frontera, Moriles, Monturque y Puente Genil), central (Fernán Núñez, La Rambla, Montilla y alrededores de Córdoba), y oriental (Espejo y Castro del Río).
El alzacola rojizo –conocido en la provincia como "colitajara", "regarsa" o "abaniquero"– presenta como principales amenazas los cambios en la forma de explotación de cultivos tradicionales, el abandono de cultivos usados como hábitat, el uso desmesurado de productos fitosanitarios, la expansión urbano disperso, la proliferación de depredadores oportunistas, los proyectos de plantas fotovoltaicas, la insuficiente protección de sus núcleos poblacionales y el cambio de las condiciones en áreas e invernada.
J.P. BELLIDO / I. TÉLLEZ
FOTOGRAFÍA: JOSÉ JIMÉNEZ CUESTA
FOTOGRAFÍA: JOSÉ JIMÉNEZ CUESTA
