El Club Deportivo Apedem consiguió ayer una trabajada victoria por cuatro tantos a uno frente al Club Deportivo Los Califas Balompié en el Estadio Municipal "Miguel Navarro" de Montilla, un triunfo que llegó gracias a la paciencia, el empuje y una dosis de orgullo cuando el marcador parecía resistirse.
No fue, ni mucho menos, un paseo para el conjunto auriverde, que volvió a tropezar con una primera parte gris, desdibujada y carente de ritmo, algo que viene repitiéndose en los últimos encuentros y que ayer se acusó aún más ante el colista.
La ausencia de Rafael Garrido en el banquillo —obligado a cumplir un partido de sanción por su expulsión la pasada semana— también marcó el arranque de la contienda. Bajo la dirección de Rafael López, el Club Deportivo Apedem necesitó tiempo para asentarse. De hecho, los primeros 45 minutos transcurrieron sin chispa.
Apenas hubo conexiones fluidas, ni actitud intensa, ni señales de la propuesta que el equipo trabaja con empeño durante la semana, gracias al exhaustivo trabajo técnico que dirige el entrenador cordobés Rafael Garrido para elevar el nivel competitivo de la plantilla. Y es que, como ya ocurriera frente a Almedinilla, Fray Albino y Alcázar, el rival convirtió su primera llegada en un golpe directo al ánimo local.
Corría el minuto 22 cuando el Club Deportivo Los Califas aprovechaba su único tiro entre los tres palos de todo el encuentro para inaugurar el marcador. Un disparo sin aparente peligro acabó en las redes después de que Román no pudiera blocar el balón. El 0-1 dejó helado al Municipal de Montilla. Sin embargo, la reacción auriverde no tardaría demasiado en asomar.
A raíz del tanto visitante, el Club Deportivo Apedem comenzó a estirarse y a pisar el área cordobesa con más decisión. Un pase medido de Szczepanski habilitó a Ezequiel Salado, que conectó un disparo certero que hubiera firmado el empate, de no ser por la buena actuación del guardameta cordobés. Esa clara ocasión liberó tensiones y abrió una vía de aire fresco justo cuando más falta hacía.
Con todo, el equipo montillano siguió insistiendo antes del descanso y, fruto de ese empuje, llegó el 1-1 momentáneo: una falta botada por Ezequiel Salado encontró la cabeza de un impecable Nico González, que definió con una parábola dulce y precisa en el minuto 44.
La segunda parte, sin embargo, sería otro partido. De igual modo que ocurrió en otras jornadas, el conjunto auriverde regresó del vestuario con un ánimo completamente distinto. El guion cambió. Hubo llegadas, ocasiones y un ritmo ofensivo mucho más reconocible.
El Club Deportivo Apedem sabía que solo la victoria le permitía recuperar la segunda plaza tras el 2-1 del Salerm Cosmetic Puente Genil sobre el Parque Cruz Conde, y esa necesidad se notó en la intensidad con la que buscó la remontada definitiva.
Aun así, las prisas y algunas pérdidas innecesarias en defensa generaron nerviosismo entre la grada y parte del cuerpo técnico, ubicado en el palco. Se reclamaba desde arriba un juego más directo, más vertical, menos expuesto atrás.
Y en medio de ese vaivén emocional apareció de nuevo Nico González. En el minuto 70, tras un centro-chut de Edu Rueda, el delantero resolvió con instinto de nueve total para anotar su quinto gol de la temporada y adelantar a los montillanos.
Esa diana abrió la puerta a una recta final vibrante, marcada por el hambre del Club Deportivo Apedem y por la irrupción decisiva de Aarón Salado. Con el equipo volcado, el atacante firmó un doblete vertiginoso: el primero, en el minuto 75, lo anotó de cabeza tras un centro preciso desde la izquierda de Javi Albornoz; el segundo, en el 78, llegó gracias a una asistencia del capitán Joseda que Aarón transformó en su séptimo gol del curso. Con ese 4-1, el partido quedó sentenciado y la grada respiró por fin con alivio.
Además, los tantos rubricaron un hito nada menor: Aarón Salado alcanzó los 31 goles y se convirtió en el máximo goleador del equipo desde su renacimiento en la temporada 2022-2023, superando los 29 tantos que había firmado Juan Alejandro Arroyo Rodríguez (Loki) en dos campañas. Una cifra que habla del momento dulce del delantero.
Pero la tarde aún tenía reservado otro instante para el recuerdo. En el tramo final, el Estadio Municipal "Miguel Navarro" de Montilla celebró el debut del cadete Isaac Zafra Comino que, con tan solo 15 años y cinco meses, se convirtió en el canterano más joven en estrenarse con el equipo Sénior.
Nunca antes un jugador en categoría Cadete había logrado tal registro. Y eso, a ojos de la afición, tuvo sabor a pequeño acontecimiento. Las ausencias, unidas a la imposibilidad de contar con juveniles —que también competían ayer—, obligaron a mirar a la cantera auriverde, cuyo trabajo constante empieza a reflejarse en hitos como este.
El partido terminó con una goleada que alimenta la moral, devuelve la segunda posición y deja una tarde llena de emociones. El Club Deportivo Apedem ganó, remontó y celebró, en una de esas jornadas que, sin ser perfectas, fortalecen la identidad de un grupo que quiere más.
No fue, ni mucho menos, un paseo para el conjunto auriverde, que volvió a tropezar con una primera parte gris, desdibujada y carente de ritmo, algo que viene repitiéndose en los últimos encuentros y que ayer se acusó aún más ante el colista.
La ausencia de Rafael Garrido en el banquillo —obligado a cumplir un partido de sanción por su expulsión la pasada semana— también marcó el arranque de la contienda. Bajo la dirección de Rafael López, el Club Deportivo Apedem necesitó tiempo para asentarse. De hecho, los primeros 45 minutos transcurrieron sin chispa.
Apenas hubo conexiones fluidas, ni actitud intensa, ni señales de la propuesta que el equipo trabaja con empeño durante la semana, gracias al exhaustivo trabajo técnico que dirige el entrenador cordobés Rafael Garrido para elevar el nivel competitivo de la plantilla. Y es que, como ya ocurriera frente a Almedinilla, Fray Albino y Alcázar, el rival convirtió su primera llegada en un golpe directo al ánimo local.
Corría el minuto 22 cuando el Club Deportivo Los Califas aprovechaba su único tiro entre los tres palos de todo el encuentro para inaugurar el marcador. Un disparo sin aparente peligro acabó en las redes después de que Román no pudiera blocar el balón. El 0-1 dejó helado al Municipal de Montilla. Sin embargo, la reacción auriverde no tardaría demasiado en asomar.
A raíz del tanto visitante, el Club Deportivo Apedem comenzó a estirarse y a pisar el área cordobesa con más decisión. Un pase medido de Szczepanski habilitó a Ezequiel Salado, que conectó un disparo certero que hubiera firmado el empate, de no ser por la buena actuación del guardameta cordobés. Esa clara ocasión liberó tensiones y abrió una vía de aire fresco justo cuando más falta hacía.
Con todo, el equipo montillano siguió insistiendo antes del descanso y, fruto de ese empuje, llegó el 1-1 momentáneo: una falta botada por Ezequiel Salado encontró la cabeza de un impecable Nico González, que definió con una parábola dulce y precisa en el minuto 44.
La segunda parte, sin embargo, sería otro partido. De igual modo que ocurrió en otras jornadas, el conjunto auriverde regresó del vestuario con un ánimo completamente distinto. El guion cambió. Hubo llegadas, ocasiones y un ritmo ofensivo mucho más reconocible.
El Club Deportivo Apedem sabía que solo la victoria le permitía recuperar la segunda plaza tras el 2-1 del Salerm Cosmetic Puente Genil sobre el Parque Cruz Conde, y esa necesidad se notó en la intensidad con la que buscó la remontada definitiva.
Aun así, las prisas y algunas pérdidas innecesarias en defensa generaron nerviosismo entre la grada y parte del cuerpo técnico, ubicado en el palco. Se reclamaba desde arriba un juego más directo, más vertical, menos expuesto atrás.
Y en medio de ese vaivén emocional apareció de nuevo Nico González. En el minuto 70, tras un centro-chut de Edu Rueda, el delantero resolvió con instinto de nueve total para anotar su quinto gol de la temporada y adelantar a los montillanos.
Esa diana abrió la puerta a una recta final vibrante, marcada por el hambre del Club Deportivo Apedem y por la irrupción decisiva de Aarón Salado. Con el equipo volcado, el atacante firmó un doblete vertiginoso: el primero, en el minuto 75, lo anotó de cabeza tras un centro preciso desde la izquierda de Javi Albornoz; el segundo, en el 78, llegó gracias a una asistencia del capitán Joseda que Aarón transformó en su séptimo gol del curso. Con ese 4-1, el partido quedó sentenciado y la grada respiró por fin con alivio.
Además, los tantos rubricaron un hito nada menor: Aarón Salado alcanzó los 31 goles y se convirtió en el máximo goleador del equipo desde su renacimiento en la temporada 2022-2023, superando los 29 tantos que había firmado Juan Alejandro Arroyo Rodríguez (Loki) en dos campañas. Una cifra que habla del momento dulce del delantero.
Pero la tarde aún tenía reservado otro instante para el recuerdo. En el tramo final, el Estadio Municipal "Miguel Navarro" de Montilla celebró el debut del cadete Isaac Zafra Comino que, con tan solo 15 años y cinco meses, se convirtió en el canterano más joven en estrenarse con el equipo Sénior.
Nunca antes un jugador en categoría Cadete había logrado tal registro. Y eso, a ojos de la afición, tuvo sabor a pequeño acontecimiento. Las ausencias, unidas a la imposibilidad de contar con juveniles —que también competían ayer—, obligaron a mirar a la cantera auriverde, cuyo trabajo constante empieza a reflejarse en hitos como este.
El partido terminó con una goleada que alimenta la moral, devuelve la segunda posición y deja una tarde llena de emociones. El Club Deportivo Apedem ganó, remontó y celebró, en una de esas jornadas que, sin ser perfectas, fortalecen la identidad de un grupo que quiere más.
C.D. Apedem 4 -- 1 C.D. Los Califas
- Club Deportivo Apedem: Román Fernández Ruiz, Felipe Montero Salas, Jávier Albornoz Hidalgo, Francisco José Jurado García, José David Urbano Jiménez, Ezequiel Salado Sánchez, Lucas Hueso Priego, Javier Maciej Szczepanski Gachewicz, Fernando Gómez Lorenzo, José Nicolás González Domínguez y Pablo Llamas Salamanca.
- Cuerpo técnico: Rafael López Espejo (entrenador), Alejandro Cerezo Fontaneda (delegado de campo) y Fernando Bonilla Berlanga (delegado de equipo).
- Club Deportivo Los Califas Balompié: Fabio Pennisi, Conte Alhassane, Gregory Graciano Amaro Resto, Eneko Carrasco Bermejo, Imad El Manssouri, José Antonio Muñoz Muñoz, Alonso Carmona González, Iago Beceiro Barros, Alberto Fernández García, Rafael Santano Poyato y Bende Macalou.
- Cuerpo técnico: Rafael Carrasco García (entrenador) y Juan Luis Cabanillas Carrasco (delegado).
- Goles: 0-1 Alonso Carmona González (min. 22); 1-1 José Nicolás González Domínguez (min. 44); 2-1 José Nicolás González Domínguez (min. 70); 3-1 Aarón Salado Sánchez (min. 75); 4-1 Aarón Salado Sánchez (min. 78).
- Árbitro: Sergio Espejo Pulido. Asistentes: Miguel Ángel González López y Derek Dolan Rodríguez.
- Amonestaciones: En el Club Deportivo Apedem recibieron tarjeta amarilla José Nicolás González Domínguez (min. 8), Francisco José Jurado García (min. 38), Lucas Hueso Priego (min. 80), Pablo Llamas Salamanca (min. 81) e Isaac Zafra Comino (min. 85). En el Club Deportivo Los Califas Balompié fueron amonestados con tarjeta amarilla Conte Alhassane (min. 18), Eneko Carrasco Bermejo (min. 30), Rafael Santano Poyato (min. 44) y Iago Beceiro Barros (min. 72).
- Incidencias: Partido correspondiente a la décima jornada de Segunda Andaluza Sénior (Grupo Único de Córdoba), disputado en el Estadio Municipal "Miguel Navarro" de Montilla.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍA: CLUB DEPORTIVO APEDEM
FOTOGRAFÍA: CLUB DEPORTIVO APEDEM















































