El Teatro Garnelo abrirá sus puertas este sábado, 1 de noviembre, a las 20.00 de la tarde, para acoger una de las propuestas culturales más emotivas de la temporada: el espectáculo Cuando éramos niños, protagonizado por el reconocido actor Pepón Nieto, junto al barítono Luis Santana y al pianista José Manuel Cuenca.
La cita promete ser un viaje íntimo y conmovedor por los versos, prosas y canciones que rinden homenaje a Mario Benedetti, uno de los grandes poetas de la literatura hispanoamericana. El montaje, con una duración aproximada de 85 minutos, entrelaza palabra y música para tejer un relato cargado de lirismo, humor y ternura.
Sobre el escenario, Pepón Nieto —una de las voces más queridas del panorama teatral español— irá desgranando textos del autor uruguayo que abordan temas universales como el amor, la justicia y la libertad, pilares esenciales de la obra de Benedetti y también de este espectáculo. A su lado, el barítono Luis Santana aportará su calidez vocal y su presencia escénica, mientras que José Manuel Cuenca acompañará al piano, envolviendo cada interpretación con una atmósfera delicada y profundamente humana.
Cuando éramos niños no es solo un título evocador, sino una invitación a reconectar con la sensibilidad y la mirada limpia de la infancia. El propio espectáculo se articula en torno a esa idea: regresar a lo esencial, a los sentimientos sencillos que nos definen y que, a menudo, la vida adulta deja a un lado. Como bien decía Benedetti, “la infancia es un privilegio de los pobres”, y ese espíritu recorre cada poema, cada nota y cada gesto de este montaje que combina el arte de decir con el arte de sentir.
El programa incluye algunos de los textos más conocidos de Benedetti, como Corazón coraza, No te rindas, Hagamos un trato, Táctica y estrategia, Te quiero o Cuando éramos niños, alternados con interpretaciones musicales que forman parte del imaginario colectivo, entre ellas, Al alba, Eres tú, Un beso y una flor, Piensa en mí, La llorona o Libre.
Esta combinación de poesía y canción convierte el recital en una experiencia envolvente que transita por los estados del alma humana. El público encontrará momentos de profunda emoción, pero también instantes de sonrisa y esperanza. Cuando éramos niños es, en definitiva, una celebración del arte como refugio y como espejo, un recordatorio de que la belleza puede encontrarse tanto en la palabra sencilla como en una melodía que acompaña desde siempre.
Con casi tres décadas de trayectoria, Pepón Nieto se ha consolidado como uno de los intérpretes más versátiles y queridos del panorama nacional. Sobre las tablas ha participado en montajes tan destacados como Martes de Carnaval, El jurado, ¡Ay Carmela!, El eunuco o La comedia de las mentiras, esta última con récord de espectadores en la historia del Festival de Teatro Clásico de Mérida. Su talento ha sido reconocido con galardones como el Premio Max al Mejor Actor, la Biznaga de Plata del Festival de Málaga, el Premio Ercilla de Teatro o la Butaca de Honor del Teatro Chapí de Villena, entre otros muchos reconocimientos.
En televisión, el actor malagueño ha participado en series tan conocidas como Los hombres de Paco, Periodistas, Veneno, 30 Monedas, Sé quién eres o Smiley, además de títulos recientes como Los enviados o Superestar. Su carrera cinematográfica también es extensa, con más de una veintena de películas junto a directores como Álex de la Iglesia, Imanol Uribe o Manuel Gutiérrez Aragón.
En este nuevo proyecto, Pepón Nieto se aleja del personaje cómico o del héroe cotidiano que tantas veces ha interpretado para mostrarse en una dimensión más íntima, más cercana al actor que recita con el alma, al intérprete que no actúa, sino que siente.
Por su parte, Luis Santana es un barítono de larga trayectoria, formado desde los cinco años y discípulo de grandes maestros como Juana Peñalver, Consuelo Barrio o Teresa Berganza. A lo largo de su carrera ha actuado en los principales teatros de España —entre ellos, el Gran Teatro del Liceo, el Auditorio Nacional de Música, el Teatro de la Maestranza o el Gran Teatro de Córdoba— y en importantes escenarios internacionales de ciudades como Roma, París, Viena, Lisboa o Milán.
Santana ha participado en recitales memorables ante los Reyes de España y ha interpretado obras como el Réquiem de Mozart o la Novena Sinfonía de Beethoven junto al Orfeón Donostiarra. Su compromiso con la música y su profunda conexión con la poesía española lo han llevado a compartir escenario con figuras de la talla de Nati Mistral o Paco Valladares, en homenajes dedicados a Teresa Berganza o Antón García Abril.
La dirección artística corre a cargo de Producciones Lastra y la propuesta técnica apuesta por una escenografía sobria, donde la iluminación se adapta al espacio y el recital fluye sin guion de luces cerrado, permitiendo que cada representación adquiera su propio ritmo y emoción. Las entradas están disponibles en este enlace.
Cuando éramos niños se presenta, así, como una de esas experiencias que trascienden el formato teatral tradicional, para convertirse en un acto de encuentro entre el artista y el espectador. La voz, el silencio, el sonido del piano y los versos de Benedetti confluyen en una atmósfera que invita a detener el tiempo, a escuchar y a recordar.
Montilla será, este sábado, testigo de ese instante suspendido en el que la palabra se hace música y la música se hace memoria. Porque, como escribió el propio Benedetti, “cuando éramos niños los viejos tenían como treinta, un charco era un océano y la muerte lisa y llana no existía”. Y quizá, por un momento, ese espíritu inocente y luminoso vuelva a respirarse entre las paredes del Teatro Garnelo.
La cita promete ser un viaje íntimo y conmovedor por los versos, prosas y canciones que rinden homenaje a Mario Benedetti, uno de los grandes poetas de la literatura hispanoamericana. El montaje, con una duración aproximada de 85 minutos, entrelaza palabra y música para tejer un relato cargado de lirismo, humor y ternura.
Sobre el escenario, Pepón Nieto —una de las voces más queridas del panorama teatral español— irá desgranando textos del autor uruguayo que abordan temas universales como el amor, la justicia y la libertad, pilares esenciales de la obra de Benedetti y también de este espectáculo. A su lado, el barítono Luis Santana aportará su calidez vocal y su presencia escénica, mientras que José Manuel Cuenca acompañará al piano, envolviendo cada interpretación con una atmósfera delicada y profundamente humana.
Cuando éramos niños no es solo un título evocador, sino una invitación a reconectar con la sensibilidad y la mirada limpia de la infancia. El propio espectáculo se articula en torno a esa idea: regresar a lo esencial, a los sentimientos sencillos que nos definen y que, a menudo, la vida adulta deja a un lado. Como bien decía Benedetti, “la infancia es un privilegio de los pobres”, y ese espíritu recorre cada poema, cada nota y cada gesto de este montaje que combina el arte de decir con el arte de sentir.
El programa incluye algunos de los textos más conocidos de Benedetti, como Corazón coraza, No te rindas, Hagamos un trato, Táctica y estrategia, Te quiero o Cuando éramos niños, alternados con interpretaciones musicales que forman parte del imaginario colectivo, entre ellas, Al alba, Eres tú, Un beso y una flor, Piensa en mí, La llorona o Libre.
Esta combinación de poesía y canción convierte el recital en una experiencia envolvente que transita por los estados del alma humana. El público encontrará momentos de profunda emoción, pero también instantes de sonrisa y esperanza. Cuando éramos niños es, en definitiva, una celebración del arte como refugio y como espejo, un recordatorio de que la belleza puede encontrarse tanto en la palabra sencilla como en una melodía que acompaña desde siempre.
Pepón Nieto: un actor que emociona más allá del guion
Con casi tres décadas de trayectoria, Pepón Nieto se ha consolidado como uno de los intérpretes más versátiles y queridos del panorama nacional. Sobre las tablas ha participado en montajes tan destacados como Martes de Carnaval, El jurado, ¡Ay Carmela!, El eunuco o La comedia de las mentiras, esta última con récord de espectadores en la historia del Festival de Teatro Clásico de Mérida. Su talento ha sido reconocido con galardones como el Premio Max al Mejor Actor, la Biznaga de Plata del Festival de Málaga, el Premio Ercilla de Teatro o la Butaca de Honor del Teatro Chapí de Villena, entre otros muchos reconocimientos.
En televisión, el actor malagueño ha participado en series tan conocidas como Los hombres de Paco, Periodistas, Veneno, 30 Monedas, Sé quién eres o Smiley, además de títulos recientes como Los enviados o Superestar. Su carrera cinematográfica también es extensa, con más de una veintena de películas junto a directores como Álex de la Iglesia, Imanol Uribe o Manuel Gutiérrez Aragón.
En este nuevo proyecto, Pepón Nieto se aleja del personaje cómico o del héroe cotidiano que tantas veces ha interpretado para mostrarse en una dimensión más íntima, más cercana al actor que recita con el alma, al intérprete que no actúa, sino que siente.
Luis Santana: una voz que ha recorrido los grandes escenarios
Por su parte, Luis Santana es un barítono de larga trayectoria, formado desde los cinco años y discípulo de grandes maestros como Juana Peñalver, Consuelo Barrio o Teresa Berganza. A lo largo de su carrera ha actuado en los principales teatros de España —entre ellos, el Gran Teatro del Liceo, el Auditorio Nacional de Música, el Teatro de la Maestranza o el Gran Teatro de Córdoba— y en importantes escenarios internacionales de ciudades como Roma, París, Viena, Lisboa o Milán.
Santana ha participado en recitales memorables ante los Reyes de España y ha interpretado obras como el Réquiem de Mozart o la Novena Sinfonía de Beethoven junto al Orfeón Donostiarra. Su compromiso con la música y su profunda conexión con la poesía española lo han llevado a compartir escenario con figuras de la talla de Nati Mistral o Paco Valladares, en homenajes dedicados a Teresa Berganza o Antón García Abril.
Un espectáculo para dejarse llevar
La dirección artística corre a cargo de Producciones Lastra y la propuesta técnica apuesta por una escenografía sobria, donde la iluminación se adapta al espacio y el recital fluye sin guion de luces cerrado, permitiendo que cada representación adquiera su propio ritmo y emoción. Las entradas están disponibles en este enlace.
Cuando éramos niños se presenta, así, como una de esas experiencias que trascienden el formato teatral tradicional, para convertirse en un acto de encuentro entre el artista y el espectador. La voz, el silencio, el sonido del piano y los versos de Benedetti confluyen en una atmósfera que invita a detener el tiempo, a escuchar y a recordar.
Montilla será, este sábado, testigo de ese instante suspendido en el que la palabra se hace música y la música se hace memoria. Porque, como escribió el propio Benedetti, “cuando éramos niños los viejos tenían como treinta, un charco era un océano y la muerte lisa y llana no existía”. Y quizá, por un momento, ese espíritu inocente y luminoso vuelva a respirarse entre las paredes del Teatro Garnelo.
JUAN PABLO BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: CANAL SUR MEDIA (ARCHIVO)
FOTOGRAFÍA: CANAL SUR MEDIA (ARCHIVO)















































