La firma montillana Aceites Bellido participó ayer en la constitución de la primera Mesa de Gobernanza Provincial de Oleoturismo Córdoba, un órgano promovido por la Diputación para impulsar el turismo vinculado al aceite de oliva virgen extra (AOVE) y la cultura del olivo en la provincia. La implicación de esta empresa familiar, referente nacional e internacional en el sector oleoturístico, reafirma el valor de un modelo de desarrollo sostenible que combina tradición, cultura y respeto por la naturaleza.
El encuentro, celebrado en el Palacio de La Merced, sede de la Diputación de Córdoba, reunió a representantes de veinte entidades públicas y privadas. Entre ellas, destacó la presencia de Aceites Bellido, cuya trayectoria de más de dos décadas en oleoturismo la convierte en ejemplo de cómo el AOVE puede trascender lo gastronómico para convertirse en una experiencia cultural y turística.
No en vano, su Molino Juan Colín —una almazara del siglo XVI enclavada en la Sierra de Montilla— ha sido distinguido recientemente con el primer premio al “Mejor Patio Ornamentado” en el Concurso Patios de Bodega y con el prestigioso galardón de la Asociación Española de Municipios del Olivo (AEMO) por su labor de difusión de la cultura del olivo.
Durante la sesión, la delegada de Hacienda y Fondos Europeos, Ana Rosa Ruz, defendió el potencial del AOVE como “verdadero referente” en la promoción turística. “Queremos que esta marca llegue a la gente y se convierta en un eje vertebrador del desarrollo económico”, subrayó.
Por su parte, el delegado de Promoción Económica, Félix Romero, destacó la necesidad de implicar a sectores diversos, desde la gastronomía hasta la cosmética, en un proyecto que busca generar nuevas oportunidades como ya lo han hecho otros ámbitos, como el enoturismo.
La creación de esta Mesa forma parte del proyecto nacional Oleoturismo España, impulsado por la Secretaría de Estado de Turismo y financiado con fondos europeos Next Generation. Además de Córdoba, participan las diputaciones de Badajoz, Cáceres, Ciudad Real, Granada, Huelva, Jaén, Sevilla y Tarragona, así como la propia AEMO. Con un presupuesto de 1,1 millones de euros, el programa contempla la organización de congresos, premios nacionales y otras acciones para consolidar este producto turístico de calidad.
En ese sentido, la participación de Aceites Bellido —con su enfoque experiencial que abarca catas sensoriales, rutas entre olivares ecológicos, un museo en plena Sierra de Montilla y un evocador Jardín de Olivos Centenarios— representa la dimensión más humana y cercana de esta propuesta, ya que no es solo una empresa que produce aceite: es una familia que acoge a los visitantes, que cuenta historias y que les transmite una pasión.
Cada año, miles de visitantes de todo el mundo cruzan las puertas del Molino Juan Colín. Lo hacen atraídos por la belleza del entorno pero, también, por el compromiso de los hermanos Francisco y Gonzalo Bellido Vela, que han sabido convertir el amor por su tierra en una experiencia turística de referencia. Una experiencia que ahora se pone al servicio de una estrategia común, que busca proyectar a Córdoba como destino oleoturístico de primer nivel.
Ayer, con la constitución de esta Mesa, se dieron los primeros pasos para diseñar un plan de desarrollo sostenible, establecer sesiones de sensibilización y ofrecer asistencia técnica a empresas y entidades locales. Se fijaron también las pautas de funcionamiento del órgano, que celebrará reuniones periódicas para seguir avanzando de forma coordinada.
Montilla, gracias a iniciativas como las de Aceites Bellido, vuelve a situarse en el mapa del turismo de calidad. Y es que el oleoturismo, más allá de modas más o menos pasajeras, conecta con lo esencial: con la tierra, con la memoria, con los sentidos. Y en ese camino, la familia Bellido Vela lleva muchos años marcando el camino.
El encuentro, celebrado en el Palacio de La Merced, sede de la Diputación de Córdoba, reunió a representantes de veinte entidades públicas y privadas. Entre ellas, destacó la presencia de Aceites Bellido, cuya trayectoria de más de dos décadas en oleoturismo la convierte en ejemplo de cómo el AOVE puede trascender lo gastronómico para convertirse en una experiencia cultural y turística.
No en vano, su Molino Juan Colín —una almazara del siglo XVI enclavada en la Sierra de Montilla— ha sido distinguido recientemente con el primer premio al “Mejor Patio Ornamentado” en el Concurso Patios de Bodega y con el prestigioso galardón de la Asociación Española de Municipios del Olivo (AEMO) por su labor de difusión de la cultura del olivo.
Durante la sesión, la delegada de Hacienda y Fondos Europeos, Ana Rosa Ruz, defendió el potencial del AOVE como “verdadero referente” en la promoción turística. “Queremos que esta marca llegue a la gente y se convierta en un eje vertebrador del desarrollo económico”, subrayó.
Por su parte, el delegado de Promoción Económica, Félix Romero, destacó la necesidad de implicar a sectores diversos, desde la gastronomía hasta la cosmética, en un proyecto que busca generar nuevas oportunidades como ya lo han hecho otros ámbitos, como el enoturismo.
La creación de esta Mesa forma parte del proyecto nacional Oleoturismo España, impulsado por la Secretaría de Estado de Turismo y financiado con fondos europeos Next Generation. Además de Córdoba, participan las diputaciones de Badajoz, Cáceres, Ciudad Real, Granada, Huelva, Jaén, Sevilla y Tarragona, así como la propia AEMO. Con un presupuesto de 1,1 millones de euros, el programa contempla la organización de congresos, premios nacionales y otras acciones para consolidar este producto turístico de calidad.
En ese sentido, la participación de Aceites Bellido —con su enfoque experiencial que abarca catas sensoriales, rutas entre olivares ecológicos, un museo en plena Sierra de Montilla y un evocador Jardín de Olivos Centenarios— representa la dimensión más humana y cercana de esta propuesta, ya que no es solo una empresa que produce aceite: es una familia que acoge a los visitantes, que cuenta historias y que les transmite una pasión.
Cada año, miles de visitantes de todo el mundo cruzan las puertas del Molino Juan Colín. Lo hacen atraídos por la belleza del entorno pero, también, por el compromiso de los hermanos Francisco y Gonzalo Bellido Vela, que han sabido convertir el amor por su tierra en una experiencia turística de referencia. Una experiencia que ahora se pone al servicio de una estrategia común, que busca proyectar a Córdoba como destino oleoturístico de primer nivel.
Ayer, con la constitución de esta Mesa, se dieron los primeros pasos para diseñar un plan de desarrollo sostenible, establecer sesiones de sensibilización y ofrecer asistencia técnica a empresas y entidades locales. Se fijaron también las pautas de funcionamiento del órgano, que celebrará reuniones periódicas para seguir avanzando de forma coordinada.
Montilla, gracias a iniciativas como las de Aceites Bellido, vuelve a situarse en el mapa del turismo de calidad. Y es que el oleoturismo, más allá de modas más o menos pasajeras, conecta con lo esencial: con la tierra, con la memoria, con los sentidos. Y en ese camino, la familia Bellido Vela lleva muchos años marcando el camino.
JUAN PABLO BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: DIPUTACIÓN DE CÓRDOBA
FOTOGRAFÍA: DIPUTACIÓN DE CÓRDOBA















































