Una campaña municipal impulsada conjuntamente por el Ayuntamiento de Montilla, la Fundación Social Universal (FSU) y Ecologistas en Acción permitió ayer reforestar el entorno de la Vereda de la Plata, en las inmediaciones del Llano Mesto, con ejemplares de especies autóctonas como algarrobos, pinos, lentiscos o adelfas.
La actividad, que reunió a una veintena de personas de todas las edades –entre las que se encontraba la teniente de alcalde de Medio Ambiente, Raquel Casado– contó con la colaboración del voluntariado ambiental de Cruz Roja Española y permitió plantar en el Llano Mesto medio centenar de árboles que han cubierto por completo las terrazas mejoradas en campañas anteriores.
"A esta campaña se unieron los voluntarios de medio ambiente de Cruz Roja Española, que han mostrado interés por ser partícipes de las actividades ambientales que se están desarrollando en nuestro municipio", destacó la ingeniera agrónoma Ángela Portero, técnica de Medio Ambiente de la FSU y responsable del Aula de Viticultura del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles.
De este modo, la campaña de reforestación de invierno "pretende abordar de manera trasversal retos tan importantes como recuperar la conexión de la población con el territorio, frenar y revertir el cambio climático e implicar a la sociedad en su entorno", en palabras de Ángela Portero.
La especialista montillana insistió en que la plantación de árboles "aporta grandes beneficios como la fijación de CO2 atmosférico y la sujeción del suelo, además de evitar la erosión y favorecer la creación de ecosistemas óptimos para albergar vida tanto de animales, insectos y aves".
"Unido a lo anterior, los árboles aportan sombra, muy necesaria para dar cobijo durante los meses de calor que, cada vez, son de mayor duración", insistió la técnica de Medio Ambiente de la FSU, quien precisó que las especies que se plantaron ayer fueron, principalmente, algarrobos, pinos, lentiscos, almeces, aladierno y adelfas, todas ellas cedidas por la Diputación de Córdoba y por la Red de Viveros de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, mediante un programa de sensibilización destinado a la recuperación del paisaje mediterráneo andaluz denominado Un árbol, un paisaje de futuro.
"Se trata de plantas forestales autóctonas y adaptadas al entorno para facilitar su mantenimiento y asegurar su supervivencia", aclaró Ángela Portero, quien recalcó que "para asegurar el éxito de las reforestaciones, en primer lugar se estudian los espacios susceptibles de mejora y se elige la mejor opción con la intención que todos los ciudadanos disfruten de ellos, contribuyendo así a la conservación del entorno natural de nuestro municipio".
Acto seguido, la FSU solicita los permisos administrativos pertinentes para poder realizar las reforestaciones en los meses de parada invernal de las plantas. "Se trata de una labor de gran importancia, que complementa las tareas de mantenimiento y riego, muy necesarias durante los meses próximos a su plantación", concluyó la responsable del Área de Medio Ambiente de la FSU.
La actividad, que reunió a una veintena de personas de todas las edades –entre las que se encontraba la teniente de alcalde de Medio Ambiente, Raquel Casado– contó con la colaboración del voluntariado ambiental de Cruz Roja Española y permitió plantar en el Llano Mesto medio centenar de árboles que han cubierto por completo las terrazas mejoradas en campañas anteriores.
"A esta campaña se unieron los voluntarios de medio ambiente de Cruz Roja Española, que han mostrado interés por ser partícipes de las actividades ambientales que se están desarrollando en nuestro municipio", destacó la ingeniera agrónoma Ángela Portero, técnica de Medio Ambiente de la FSU y responsable del Aula de Viticultura del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles.
De este modo, la campaña de reforestación de invierno "pretende abordar de manera trasversal retos tan importantes como recuperar la conexión de la población con el territorio, frenar y revertir el cambio climático e implicar a la sociedad en su entorno", en palabras de Ángela Portero.
La especialista montillana insistió en que la plantación de árboles "aporta grandes beneficios como la fijación de CO2 atmosférico y la sujeción del suelo, además de evitar la erosión y favorecer la creación de ecosistemas óptimos para albergar vida tanto de animales, insectos y aves".
"Unido a lo anterior, los árboles aportan sombra, muy necesaria para dar cobijo durante los meses de calor que, cada vez, son de mayor duración", insistió la técnica de Medio Ambiente de la FSU, quien precisó que las especies que se plantaron ayer fueron, principalmente, algarrobos, pinos, lentiscos, almeces, aladierno y adelfas, todas ellas cedidas por la Diputación de Córdoba y por la Red de Viveros de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, mediante un programa de sensibilización destinado a la recuperación del paisaje mediterráneo andaluz denominado Un árbol, un paisaje de futuro.
"Se trata de plantas forestales autóctonas y adaptadas al entorno para facilitar su mantenimiento y asegurar su supervivencia", aclaró Ángela Portero, quien recalcó que "para asegurar el éxito de las reforestaciones, en primer lugar se estudian los espacios susceptibles de mejora y se elige la mejor opción con la intención que todos los ciudadanos disfruten de ellos, contribuyendo así a la conservación del entorno natural de nuestro municipio".
Acto seguido, la FSU solicita los permisos administrativos pertinentes para poder realizar las reforestaciones en los meses de parada invernal de las plantas. "Se trata de una labor de gran importancia, que complementa las tareas de mantenimiento y riego, muy necesarias durante los meses próximos a su plantación", concluyó la responsable del Área de Medio Ambiente de la FSU.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍAS: AYTO. MONTILLA
FOTOGRAFÍAS: AYTO. MONTILLA
