La Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía se ha pronunciado favorablemente sobre la puesta en marcha del proyecto básico de rehabilitación del patio y de la sala expositiva proyectada por el Ayuntamiento de Montilla en las instalaciones del Convento de Santa Clara, concretamente en las naves situadas junto a las calles Pozo Dulce y Benedicto XIII, anexas a la capilla del Padre de Familias.
De esta forma, el Consistorio montillano da un paso más en la puesta en marcha de un proyecto que permitirá abrir a la sociedad uno de los conjuntos patrimoniales más importantes de Andalucía, un elemento que servirá para impulsar el desarrollo turístico de la ciudad tras el acuerdo suscrito hace un año entre el Ayuntamiento de Montilla y la congregación de las hermanas clarisas franciscanas que habitan este cenobio, edificado en el siglo XVI por mandato del primer marqués de Priego y declarado monumento histórico-artístico de carácter nacional.
Con todo, si bien el organismo que preside Cristina Casanueva, delegada de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, informó favorablemente de manera unánime sobre esta actuación, condicionó la posterior autorización a la presentación del correspondiente proyecto de ejecución "que detalle completamente todas las actuaciones a realiza", al tiempo que refleje "las observaciones expuestas en el apartado de valoración".
El proyecto para la rehabilitación del patio y de la futura sala expositiva prevé una inversión de 900.000 euros. Con ello, tras esta actuación que se incluye en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) Imagina Montilla –financiada a través de Fondos Feder en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España (POPE) 2014-2020–, el Consistorio confía en abrir las puertas del futuro espacio museístico en el año 2025, coincidiendo con el quinto centenario de su fundación a manos de María Jesús de Luna, hija menor del primer marqués de Priego.
"Gracias a la responsabilidad de las hermanas clarisas va a ser posible recuperar una pieza importante de nuestro patrimonio y de nuestra propia identidad", señaló el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, tras la cesión de estas instalaciones, un acuerdo que supuso poner un broche de oro a más de tres décadas de trabajo por parte del Ayuntamiento y las hermanas clarisas.
Así, los primeros pasos para favorecer la cesión de parte de las instalaciones del Convento de Santa Clara con el fin de evitar el deterioro de este inmueble comenzaron en el año 1991, con especial atención a la conservación de las naves traseras que confluyen entre las calles Benedicto XIII y Pozo Dulce.
Desde entonces, el Ayuntamiento y la comunidad de las hermanas clarisas han trabajado para hacer posible la conservación de una de las joyas patrimoniales de Montilla por su arquitectura y por los tesoros que alberga que, dada su titularidad privada, no permitía una intervención con fondos públicos.
Complejo palaciego
La construcción del convento, a principios del siglo XVI, se enmarcó en el complejo palaciego de los marqueses de Priego, entre los que destacan las figuras de Pedro Fernández de Córdoba y su hija Catalina, a quien se debe la fundación de la orden femenina.
En su origen, el edificio estuvo destinado a convento franciscano, pero poco tiempo después se transformó en convento de las hermanas clarisas franciscanas. La construcción del Palacio Ducal de Medinaceli supuso la conformación del Llano de Palacio, espacio urbano y centro de poder del marquesado de Priego, delimitado por la casa palaciega, comunicada con el convento a través del popular arco de Santa Clara.
El Palacio de los Duques de Medinaceli, que el Consistorio también se ha planteado recuperar, empezó a edificarse en 1510 extramuros de la villa. Formó un gran conjunto con caballerizas, graneros, cocheras, talleres y molinos, todo ello prácticamente desaparecido, en torno al espacio libre conocido como Llano de Palacio.
De esta forma, el Consistorio montillano da un paso más en la puesta en marcha de un proyecto que permitirá abrir a la sociedad uno de los conjuntos patrimoniales más importantes de Andalucía, un elemento que servirá para impulsar el desarrollo turístico de la ciudad tras el acuerdo suscrito hace un año entre el Ayuntamiento de Montilla y la congregación de las hermanas clarisas franciscanas que habitan este cenobio, edificado en el siglo XVI por mandato del primer marqués de Priego y declarado monumento histórico-artístico de carácter nacional.
Con todo, si bien el organismo que preside Cristina Casanueva, delegada de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, informó favorablemente de manera unánime sobre esta actuación, condicionó la posterior autorización a la presentación del correspondiente proyecto de ejecución "que detalle completamente todas las actuaciones a realiza", al tiempo que refleje "las observaciones expuestas en el apartado de valoración".
El proyecto para la rehabilitación del patio y de la futura sala expositiva prevé una inversión de 900.000 euros. Con ello, tras esta actuación que se incluye en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) Imagina Montilla –financiada a través de Fondos Feder en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España (POPE) 2014-2020–, el Consistorio confía en abrir las puertas del futuro espacio museístico en el año 2025, coincidiendo con el quinto centenario de su fundación a manos de María Jesús de Luna, hija menor del primer marqués de Priego.
"Gracias a la responsabilidad de las hermanas clarisas va a ser posible recuperar una pieza importante de nuestro patrimonio y de nuestra propia identidad", señaló el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, tras la cesión de estas instalaciones, un acuerdo que supuso poner un broche de oro a más de tres décadas de trabajo por parte del Ayuntamiento y las hermanas clarisas.
Así, los primeros pasos para favorecer la cesión de parte de las instalaciones del Convento de Santa Clara con el fin de evitar el deterioro de este inmueble comenzaron en el año 1991, con especial atención a la conservación de las naves traseras que confluyen entre las calles Benedicto XIII y Pozo Dulce.
Desde entonces, el Ayuntamiento y la comunidad de las hermanas clarisas han trabajado para hacer posible la conservación de una de las joyas patrimoniales de Montilla por su arquitectura y por los tesoros que alberga que, dada su titularidad privada, no permitía una intervención con fondos públicos.
Complejo palaciego
La construcción del convento, a principios del siglo XVI, se enmarcó en el complejo palaciego de los marqueses de Priego, entre los que destacan las figuras de Pedro Fernández de Córdoba y su hija Catalina, a quien se debe la fundación de la orden femenina.
En su origen, el edificio estuvo destinado a convento franciscano, pero poco tiempo después se transformó en convento de las hermanas clarisas franciscanas. La construcción del Palacio Ducal de Medinaceli supuso la conformación del Llano de Palacio, espacio urbano y centro de poder del marquesado de Priego, delimitado por la casa palaciega, comunicada con el convento a través del popular arco de Santa Clara.
El Palacio de los Duques de Medinaceli, que el Consistorio también se ha planteado recuperar, empezó a edificarse en 1510 extramuros de la villa. Formó un gran conjunto con caballerizas, graneros, cocheras, talleres y molinos, todo ello prácticamente desaparecido, en torno al espacio libre conocido como Llano de Palacio.
I. TÉLLEZ / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
