La Inspectoría Salesiana María Auxiliadora dio ayer su último adiós al sacerdote montillano Miguel Raigón Córdoba, que falleció el pasado domingo a la edad de 81 años en el Hospital QuirónSalud Infanta Luisa de Sevilla, donde se encontraba ingresado por unos problemas de salud que llevaba arrastrando desde hacía algún tiempo.
Nacido en Montilla el 20 de octubre de 1938, Miguel Raigón hizo el noviciado en la localidad gaditana de San José del Valle, donde profesó el 16 de agosto de 1955, por lo que este verano hubiera cumplido 65 años como sacerdote salesiano.
Tras estudiar Filosofía en el Rectorado del Santuario de Consolación de Utrera, concluyó su formación en La Orotava (1959-60) y en Pozoblanco (1960-61), cursando posteriormente estudios de Teología en Posadas (1961-63) y en Sanlúcar la Mayor (1963-65), donde recibió la ordenación presbiteral el 27 de marzo de 1965.
Desde entonces, Miguel Raigón desarrolló su labor pastoral en Palma del Río (1965-66 y 1975-79), Pedro Abad (1966-67), Las Palmas (1973-75; 1983-86 y 1997-2003), Málaga (1982-83), Pozoblanco (2003-05) y Alcalá de Guadaíra (2007-11).
A su vez, estuvo destinado en Córdoba en varios períodos: entre 1979 y 1982 llegó a ser consejero inspectorial a la vez que director y entre 1986 y 1997 fue ecónomo inspectorial de la Casa Salesiana de Córdoba, a donde regresó en 2011 procedente de la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra
"Don Miguel será recordado como buen salesiano, alegre, disponible y servicial", resaltaron ayer desde Salesianos Córdoba, donde tuvo lugar su funeral en el santuario de María Auxiliadora, presidido por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, y concelebrada por un gran número de sacerdotes. Después, sus restos mortales fueron incinerados y sus cenizas se depositaron en el columbario del mismo santuario.
El equipo humano que conforma Montilla Digital se une al dolor que ha provocado entre familiares y amigos la pérdida de este montillano comprometido con la educación y con la transmisión de valores en el ámbito de la Familia Salesiana.
Nacido en Montilla el 20 de octubre de 1938, Miguel Raigón hizo el noviciado en la localidad gaditana de San José del Valle, donde profesó el 16 de agosto de 1955, por lo que este verano hubiera cumplido 65 años como sacerdote salesiano.
Tras estudiar Filosofía en el Rectorado del Santuario de Consolación de Utrera, concluyó su formación en La Orotava (1959-60) y en Pozoblanco (1960-61), cursando posteriormente estudios de Teología en Posadas (1961-63) y en Sanlúcar la Mayor (1963-65), donde recibió la ordenación presbiteral el 27 de marzo de 1965.
Desde entonces, Miguel Raigón desarrolló su labor pastoral en Palma del Río (1965-66 y 1975-79), Pedro Abad (1966-67), Las Palmas (1973-75; 1983-86 y 1997-2003), Málaga (1982-83), Pozoblanco (2003-05) y Alcalá de Guadaíra (2007-11).A su vez, estuvo destinado en Córdoba en varios períodos: entre 1979 y 1982 llegó a ser consejero inspectorial a la vez que director y entre 1986 y 1997 fue ecónomo inspectorial de la Casa Salesiana de Córdoba, a donde regresó en 2011 procedente de la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra
"Don Miguel será recordado como buen salesiano, alegre, disponible y servicial", resaltaron ayer desde Salesianos Córdoba, donde tuvo lugar su funeral en el santuario de María Auxiliadora, presidido por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, y concelebrada por un gran número de sacerdotes. Después, sus restos mortales fueron incinerados y sus cenizas se depositaron en el columbario del mismo santuario.
El equipo humano que conforma Montilla Digital se une al dolor que ha provocado entre familiares y amigos la pérdida de este montillano comprometido con la educación y con la transmisión de valores en el ámbito de la Familia Salesiana.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍAS: SALESIANOS CÓRDOBA
FOTOGRAFÍAS: SALESIANOS CÓRDOBA
