Recuerdo que de pequeña, ante un descuido de mis padres, vi en televisión una versión cinematográfica de Retrato de Dorian Gray y quedé traumatizada. Ya de mayor leí el libro, bastante oscuro, y bastante misógino también.
Creo que para entender una obra, hay que leer la biografía del autor. Las páginas de ese libro encierran los demonios que poblaban la mente de Oscar Wilde. Imaginaros que su madre –a la que le horrorizaba su homosexualidad- lo vestía como una niña, porque era lo que ella deseaba que fuera. Dicen los psicólogos, y yo lo creo así, que los primeros años de nuestra vida son fundamentales para formar nuestra personalidad. Pues digamos que a él no se lo pusieron fácil.
El protagonista tiene un lado oscuro que, seguramente, tiene que ver con la sexualidad, y la culpabilidad ligada a ella. La verdad es que en esa época el sexo era un tema tenebroso, ya fueras homo o heterosexual.
El hecho de que la religión vea todo lo referente al cuerpo como algo pecaminoso, hace que esa parte de nuestra naturaleza no se viva de una manera “natural”, valga la redundancia. También puedo entender su misoginia, con esa madre, arquetipo para él de lo que era la femineidad…
Sin embargo, quedé gratamente sorprendida cuando leí El Fantasma de Canterville, libro que recomiendo, si se quiere pasar una tarde divertida. Y digo una tarde porque es un relato relativamente cortito, en el que Wilde nos da una imagen rocambolesca de los americanos.
Digamos que el cuento va de la frustración de un fantasma por no poder desempeñar bien su papel, y la culpa la tienen unos americanos que han alquilado el castillo en el que él vivía plácidamente hasta la llegada de esos estadounidenses. Para honrar la memoria de este gran escritor, yo pondría de fondo alguna música tradicional de su bonita y alegre tierra: Irlanda.
Ficha literaria
Título: El Fantasma de Canterville.
Autor: Oscar Wilde.
Género: Cuento.
Título original: The Canterville Ghost.
Fecha de publicación: 1887.
Editorial: Funambulista.
ISBN: 978-84-96601161.
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El protagonista tiene un lado oscuro que, seguramente, tiene que ver con la sexualidad, y la culpabilidad ligada a ella. La verdad es que en esa época el sexo era un tema tenebroso, ya fueras homo o heterosexual.
El hecho de que la religión vea todo lo referente al cuerpo como algo pecaminoso, hace que esa parte de nuestra naturaleza no se viva de una manera “natural”, valga la redundancia. También puedo entender su misoginia, con esa madre, arquetipo para él de lo que era la femineidad…
Sin embargo, quedé gratamente sorprendida cuando leí El Fantasma de Canterville, libro que recomiendo, si se quiere pasar una tarde divertida. Y digo una tarde porque es un relato relativamente cortito, en el que Wilde nos da una imagen rocambolesca de los americanos.
Digamos que el cuento va de la frustración de un fantasma por no poder desempeñar bien su papel, y la culpa la tienen unos americanos que han alquilado el castillo en el que él vivía plácidamente hasta la llegada de esos estadounidenses. Para honrar la memoria de este gran escritor, yo pondría de fondo alguna música tradicional de su bonita y alegre tierra: Irlanda.
Ficha literaria
Título: El Fantasma de Canterville.
Autor: Oscar Wilde.
Género: Cuento.
Título original: The Canterville Ghost.
Fecha de publicación: 1887.
Editorial: Funambulista.
ISBN: 978-84-96601161.
MARÍA JESÚS SÁNCHEZ / REDACCIÓN
