Montilla Digital se hace eco en su Buzón del Lector de una crónica remitida por el Grupo de Montaña Piedra Luenga acerca de la décima edición de la Travesía por la Sierra de Montilla, que reunió en la localidad a 200 senderistas llegados desde distintos puntos de Andalucía. Si desea participar en esta sección, puede enviar un correo electrónico exponiendo su queja, comentario, sugerencia o relato. Si quiere, puede acompañar su mensaje de alguna fotografía.
El pasado domingo, a las nueve menos cuarto, daba comienzo nuestra X Travesía por la Sierra de Montilla en el Museo del Aceite de Bellido. Allí habíamos desayunado unos ricos molletes bañados en ese oro líquido que son los aceites de Bellido, y un café calentito para acometer los 22 kilómetros que teníamos por delante.
Este año nos hemos visto desbordados de nuevo. Unas 200 personas han compartido con nosotros la jornada y sentimos mucho haber tenido que dejar fuera a muchos, pero esperamos que el año que viene puedan hacerlo.
Este año ha sido especial ya que cumplíamos diez años de realización de nuestra travesía y decidimos hacer algo especial. Gente venida de toda Andalucía, el 70 por ciento de los participantes son de fuera, han visto algo más que la Sierra de Montilla en esta ocasión. El calor y las largas cuestas se han visto ampliamente recompensadas.
Hemos pasado por el Lagar de los Borbones, donde sus ricos caldos nos han dado energía para subir al Cerro Macho, punto más alto del término municipal. Subida emblemática que lleva en nuestro itinerario desde que nació la Travesía por la Sierra de Montilla, y que con su desnivel hace que las pulsaciones también lleguen a su punto más alto.
Desde allí nos fuimos hasta el Lagar Blanco donde, de nuevo, esos maravillosos vinos de nuestra tierra nos dieron el impulso hacia nuestra meta en la ciudad de Montilla. Aunque antes de llegar nos tomamos un Pedro Ximénez en la casa rural Cuesta Blanca. Al final ofrecimos un almuerzo y unas bebidas frías que supieron a poco.
Muchas de las personas que nos acompañaron son repetidores, y algunas de muchos años, otros era la primera vez que venían con nosotros. Todos ellos se despidieron este año de nuestra Travesía y de nuestra ciudad con un mejor sabor de boca, que para ello somos la Ciudad del Vino.
Gracias a todos ellos por su saber estar, sus chistes, sus comentarios y, sobre todo, por compartir con nosotros el camino. Os esperamos el año que viene.
El pasado domingo, a las nueve menos cuarto, daba comienzo nuestra X Travesía por la Sierra de Montilla en el Museo del Aceite de Bellido. Allí habíamos desayunado unos ricos molletes bañados en ese oro líquido que son los aceites de Bellido, y un café calentito para acometer los 22 kilómetros que teníamos por delante.
Este año nos hemos visto desbordados de nuevo. Unas 200 personas han compartido con nosotros la jornada y sentimos mucho haber tenido que dejar fuera a muchos, pero esperamos que el año que viene puedan hacerlo.
Este año ha sido especial ya que cumplíamos diez años de realización de nuestra travesía y decidimos hacer algo especial. Gente venida de toda Andalucía, el 70 por ciento de los participantes son de fuera, han visto algo más que la Sierra de Montilla en esta ocasión. El calor y las largas cuestas se han visto ampliamente recompensadas.
Hemos pasado por el Lagar de los Borbones, donde sus ricos caldos nos han dado energía para subir al Cerro Macho, punto más alto del término municipal. Subida emblemática que lleva en nuestro itinerario desde que nació la Travesía por la Sierra de Montilla, y que con su desnivel hace que las pulsaciones también lleguen a su punto más alto.
Desde allí nos fuimos hasta el Lagar Blanco donde, de nuevo, esos maravillosos vinos de nuestra tierra nos dieron el impulso hacia nuestra meta en la ciudad de Montilla. Aunque antes de llegar nos tomamos un Pedro Ximénez en la casa rural Cuesta Blanca. Al final ofrecimos un almuerzo y unas bebidas frías que supieron a poco.
Muchas de las personas que nos acompañaron son repetidores, y algunas de muchos años, otros era la primera vez que venían con nosotros. Todos ellos se despidieron este año de nuestra Travesía y de nuestra ciudad con un mejor sabor de boca, que para ello somos la Ciudad del Vino.
Gracias a todos ellos por su saber estar, sus chistes, sus comentarios y, sobre todo, por compartir con nosotros el camino. Os esperamos el año que viene.
GRUPO DE MONTAÑA PIEDRA LUENGA
