Montilla ya apuesta por el futuro. Su normativa de teletrabajo es clara, más, flexible, más equilibrado, mejor calidad de vida. Se pueden trabajar desde casa para aquellos empleados que bien el servicio lo permita. Se trata de la solución fiable y contemporánea, diseñado para encontrar un punto medio, para funcionar de manera no atada a un despacho. Se pretende aumentar la conciliación trabajo-vida personal.
No hay duda que trabajar desde casa está bien, es cómodo, pero también tiene peligro. Cuida de tu conexión primero. Porque tu red hogareña puede ser baja y eso es donde ya empiezan los males.
Utiliza en todo momento una VPN así tus datos viajen segures. Sin ella todo queda descubierto. No arriesgarte. Utiliza claves largas, únicas y cámbialas con frecuencia. Y no para sol. Desactiva el doble de verificación. Un paso más te sabe a Jou a un disgusto.
actualiza tu sistema aunque sea pesadilla. Lo mismo pasa en el caso del antivirus. Las actualizaciones no se limitan a la mejora: también dejan los agujeros de seguridad.
Y ojo con Tu router: reemplaza la contraseña de forma predeterminada, cifrado WPA2, cierra que no te conecte nadie más. Y un detalle que muchos olvidan: comprueba tu dirección IP. Hazlo de vez en cuando, entonces verás si hay ambos. Si algo sale mal, actúa a toda velocidad.
Evita después. Si tienes que salir no te conectes sin VPN. Cafeterías, bibliotecas, aeropuertos… su wifi no es seguro pese a lo que parezca.
Si es poco, te bloquea todo tu dispositivo de tu teléfono a distancia. A final: sale, log out, desactivada. Cada paso es, no te arrepentirás. Lo también tiene claro la Junta: más teletrabajo, más rendimiento. Ya contempla hasta cuatro días de trabajo en homeótica para bastantes funcionarios públicos.
¿El objetivo? Optar por el ahorro en el tiempo, la salud, y una gran mejora, en los Resultados. Pero no todo es singar. El aislamiento pesa, el estrés digital aparece, y la línea entre casa y trabajo se difumina.
Establece límites: fuga del trabajo en casa, únete a una clase de (fisioterapia) en Zoom, no revisites la Google.com. Habla con tus compañeros, toma descansos, actividad. A simple dice, pero funciona.
Y si puedes, haz un perchero solo para trabajar. Un bueno sala cómoda, pulcramente adaptada al buen usus: aquí trabajo, allí descanso.
Los científicos han demostrado: menos movimientos, más sueño, más contenido en la alimentación. Pero también: más tentación de no parar, de estar siempre disponibles. No vaciles. La receta, equilibrio, rutina, orden.
Montilla seguro está del punto que el teletrabajo no tiene nada que ver con la moda, que es un presente. Pero bien se ha de hacer. Con metiendo m Rudos, con cabeza. La tecnología sirve en algo, pero el resto es cuestión de usarte: paga con buenas contraseñas, equipos actualizados y usa VPN. Y no te olvides desde que mirar tu IP. Hazlo antes de empezar, es rápido, y puede evitarte muchos problemas.
El cambio ya está presente. Montilla se cambia. Y tú sí puedes. Conectarse desde casa, sí, pero en seguridad Andar de pijama vale, pero responsable, porque trabajarse desde casa no significa de nada, es hacer mejor trama tiempo, para todos.
No hay duda que trabajar desde casa está bien, es cómodo, pero también tiene peligro. Cuida de tu conexión primero. Porque tu red hogareña puede ser baja y eso es donde ya empiezan los males.
Utiliza en todo momento una VPN así tus datos viajen segures. Sin ella todo queda descubierto. No arriesgarte. Utiliza claves largas, únicas y cámbialas con frecuencia. Y no para sol. Desactiva el doble de verificación. Un paso más te sabe a Jou a un disgusto.
actualiza tu sistema aunque sea pesadilla. Lo mismo pasa en el caso del antivirus. Las actualizaciones no se limitan a la mejora: también dejan los agujeros de seguridad.
Y ojo con Tu router: reemplaza la contraseña de forma predeterminada, cifrado WPA2, cierra que no te conecte nadie más. Y un detalle que muchos olvidan: comprueba tu dirección IP. Hazlo de vez en cuando, entonces verás si hay ambos. Si algo sale mal, actúa a toda velocidad.
Evita después. Si tienes que salir no te conectes sin VPN. Cafeterías, bibliotecas, aeropuertos… su wifi no es seguro pese a lo que parezca.
Si es poco, te bloquea todo tu dispositivo de tu teléfono a distancia. A final: sale, log out, desactivada. Cada paso es, no te arrepentirás. Lo también tiene claro la Junta: más teletrabajo, más rendimiento. Ya contempla hasta cuatro días de trabajo en homeótica para bastantes funcionarios públicos.
¿El objetivo? Optar por el ahorro en el tiempo, la salud, y una gran mejora, en los Resultados. Pero no todo es singar. El aislamiento pesa, el estrés digital aparece, y la línea entre casa y trabajo se difumina.
Establece límites: fuga del trabajo en casa, únete a una clase de (fisioterapia) en Zoom, no revisites la Google.com. Habla con tus compañeros, toma descansos, actividad. A simple dice, pero funciona.
Y si puedes, haz un perchero solo para trabajar. Un bueno sala cómoda, pulcramente adaptada al buen usus: aquí trabajo, allí descanso.
Los científicos han demostrado: menos movimientos, más sueño, más contenido en la alimentación. Pero también: más tentación de no parar, de estar siempre disponibles. No vaciles. La receta, equilibrio, rutina, orden.
Montilla seguro está del punto que el teletrabajo no tiene nada que ver con la moda, que es un presente. Pero bien se ha de hacer. Con metiendo m Rudos, con cabeza. La tecnología sirve en algo, pero el resto es cuestión de usarte: paga con buenas contraseñas, equipos actualizados y usa VPN. Y no te olvides desde que mirar tu IP. Hazlo antes de empezar, es rápido, y puede evitarte muchos problemas.
El cambio ya está presente. Montilla se cambia. Y tú sí puedes. Conectarse desde casa, sí, pero en seguridad Andar de pijama vale, pero responsable, porque trabajarse desde casa no significa de nada, es hacer mejor trama tiempo, para todos.


















































