Izquierda Unida (IU) y el Partido Comunista de España (PCE) han recuperado este verano en Montilla el espíritu crítico y social del Séptimo Arte con un nuevo ciclo de cine que se celebrará a partir de mañana en su sede de la calle Fuentes. La iniciativa, que se desarrollará en el patio interior del número 35, toma el testigo de las recordadas Jornadas de Cine Independiente que durante más de una década promovieron las Juventudes Comunistas de Montilla.
Serán seis proyecciones, todas ellas con inicio previsto a las 22.00 de la noche, que buscarán mucho más que el simple entretenimiento. Y es que cada película seleccionada abre ventanas a realidades incómodas, pasadas o presentes, pero siempre necesarias. Desde la lucha vecinal por el derecho a la ciudad hasta el ecoactivismo, pasando por el feminismo, los abusos de poder o el conflicto palestino-israelí, el cine de verano de IU y el PCE se propone remover conciencias en un entorno acogedor, con acceso libre hasta completar aforo.
La programación arranca mañana jueves con El 47, un drama biográfico dirigido por Marcel Barrena que narra la historia de Manolo Vital, un conductor de autobús en la Barcelona de los años sesenta y setenta que desafió a las autoridades conduciendo la línea 47 hasta las barriadas marginales levantadas por inmigrantes andaluces y extremeños. La cinta, protagonizada por Eduard Fernández, retrata la dignidad de quienes construyeron los barrios olvidados por la Administración.
Un día más tarde, el viernes 1 de agosto, llegará La mujer de la montaña, una aplaudida producción islandesa-francesa-ucraniana firmada por Benedikt Erlingsson. En ella, su protagonista, Halla —una directora de coro que también es activista medioambiental—, se enfrenta al dilema entre su lucha ecologista y la oportunidad de adoptar a una niña ucraniana. Una fábula moderna que mezcla tensión, ternura y una defensa sin concesiones de la naturaleza frente al poder económico.
Dos semanas después, el jueves 14 de agosto, será el turno de Al descubierto (She Said), la película estadounidense que reconstruye la investigación periodística que desveló los abusos del productor Harvey Weinstein. Con Carey Mulligan y Zoe Kazan dando vida a las periodistas de The New York Times que impulsaron el movimiento #MeToo, la cinta se convierte en una reflexión sobre el valor del periodismo de investigación y el coste de romper el silencio.
De igual modo, el sábado 16 de agosto se proyectará Belfast, la obra más íntima del director Kenneth Branagh. Ambientada en la Irlanda del Norte de los años sesenta, durante el inicio del conflicto armado, esta cinta en blanco y negro narra la infancia de un niño atrapado entre la violencia callejera y el calor de su familia. Una mirada luminosa a una etapa oscura de la historia europea que ha cosechado aplausos y premios por igual.
El jueves 21 de agosto, el cine de verano de IU y el PCE se sumergirá en la historia reciente de España con Las buenas compañías, de Sílvia Munt. Ambientada en el verano de 1977, la película recupera la lucha feminista por el derecho al aborto en plena Transición y se inspira en el caso de Las once de Basauri, mujeres procesadas por abortar. Alicia Falcó encarna a Bea, una joven que despierta al activismo y al amor en una sociedad en ebullición.
Por último, el ciclo se cerrará el sábado 23 de agosto con Omar, del director palestino Hany Abu-Assad. Esta intensa historia de amor y traición en el contexto del conflicto entre Israel y Palestina fue nominada al Óscar a mejor película extranjera en 2014 y premiada en Cannes. A través del drama de su protagonista, la película dibuja el complejo mapa de lealtades, delaciones y resistencia que atraviesa la vida cotidiana en los territorios ocupados.
Serán seis proyecciones, todas ellas con inicio previsto a las 22.00 de la noche, que buscarán mucho más que el simple entretenimiento. Y es que cada película seleccionada abre ventanas a realidades incómodas, pasadas o presentes, pero siempre necesarias. Desde la lucha vecinal por el derecho a la ciudad hasta el ecoactivismo, pasando por el feminismo, los abusos de poder o el conflicto palestino-israelí, el cine de verano de IU y el PCE se propone remover conciencias en un entorno acogedor, con acceso libre hasta completar aforo.
La programación arranca mañana jueves con El 47, un drama biográfico dirigido por Marcel Barrena que narra la historia de Manolo Vital, un conductor de autobús en la Barcelona de los años sesenta y setenta que desafió a las autoridades conduciendo la línea 47 hasta las barriadas marginales levantadas por inmigrantes andaluces y extremeños. La cinta, protagonizada por Eduard Fernández, retrata la dignidad de quienes construyeron los barrios olvidados por la Administración.
Un día más tarde, el viernes 1 de agosto, llegará La mujer de la montaña, una aplaudida producción islandesa-francesa-ucraniana firmada por Benedikt Erlingsson. En ella, su protagonista, Halla —una directora de coro que también es activista medioambiental—, se enfrenta al dilema entre su lucha ecologista y la oportunidad de adoptar a una niña ucraniana. Una fábula moderna que mezcla tensión, ternura y una defensa sin concesiones de la naturaleza frente al poder económico.
Dos semanas después, el jueves 14 de agosto, será el turno de Al descubierto (She Said), la película estadounidense que reconstruye la investigación periodística que desveló los abusos del productor Harvey Weinstein. Con Carey Mulligan y Zoe Kazan dando vida a las periodistas de The New York Times que impulsaron el movimiento #MeToo, la cinta se convierte en una reflexión sobre el valor del periodismo de investigación y el coste de romper el silencio.
De igual modo, el sábado 16 de agosto se proyectará Belfast, la obra más íntima del director Kenneth Branagh. Ambientada en la Irlanda del Norte de los años sesenta, durante el inicio del conflicto armado, esta cinta en blanco y negro narra la infancia de un niño atrapado entre la violencia callejera y el calor de su familia. Una mirada luminosa a una etapa oscura de la historia europea que ha cosechado aplausos y premios por igual.
El jueves 21 de agosto, el cine de verano de IU y el PCE se sumergirá en la historia reciente de España con Las buenas compañías, de Sílvia Munt. Ambientada en el verano de 1977, la película recupera la lucha feminista por el derecho al aborto en plena Transición y se inspira en el caso de Las once de Basauri, mujeres procesadas por abortar. Alicia Falcó encarna a Bea, una joven que despierta al activismo y al amor en una sociedad en ebullición.
Por último, el ciclo se cerrará el sábado 23 de agosto con Omar, del director palestino Hany Abu-Assad. Esta intensa historia de amor y traición en el contexto del conflicto entre Israel y Palestina fue nominada al Óscar a mejor película extranjera en 2014 y premiada en Cannes. A través del drama de su protagonista, la película dibuja el complejo mapa de lealtades, delaciones y resistencia que atraviesa la vida cotidiana en los territorios ocupados.
JUAN PABLO BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JUAN PABLO BELLIDO (ARCHIVO)
FOTOGRAFÍA: JUAN PABLO BELLIDO (ARCHIVO)


















































