El Colegio Salesiano "San Francisco Solano" acaba de dar a conocer el himno conmemorativo del 125.º aniversario de la fundación de la Casa Salesiana de Montilla, una institución que, desde el año 1899, ha supuesto todo un pilar educativo y espiritual en la localidad de la Campiña Sur.
La obra es fruto de la colaboración entre José María Luque Jurado, director musical de la Coral Montillana de Antiguos Alumnos de Don Bosco y del grupo Capachos, y el cordobés Nico Barrena. La creación conjunta de estos dos artistas ha dado como resultado una pieza musical que abraza el espíritu salesiano y la rica historia de la congregación en Montilla.
El himno, cuya grabación y masterización han sido realizadas por el propio Nico Barrena, cuenta con la voz principal de Fran Espejo Raya, acompañado en los coros por Isa Navarro Pecci y el propio Espejo Raya. El diseño del logotipo conmemorativo, obra de Manuel Alférez Hidalgo, complementa visualmente la obra, que cuenta también con un videoclip editado por Félix Contreras Luque.
"Queremos que lo escuches, que lo cantes, que lo compartas y que transmitas esa alegría salesiana que sale del corazón y que está llena de esperanza y de futuro", sostiene Mamen Sánchez Ruz, profesora de Infantil del Colegio Salesiano "San Francisco Solano".
El vínculo de los Salesianos con Montilla comenzó en octubre de 1899, cuando la congregación se estableció en la casa de Teresa Enríquez, ubicada en el Llano de Palacio junto al singular arco de Santa Clara. No obstante, este primer emplazamiento sería temporal, ya que en 1900 se trasladaron a una nueva sede en la calle Tarasquilla, hoy conocida como Beato Miguel Molina.
Sin duda, un acontecimiento memorable en la flamante historia de la Casa Salesiana fue la llegada de la primera imagen de María Auxiliadora en mayo de 1900. Esta talla, costeada por Francisco de Alvear, conde de La Cortina, fue realizada en los Talleres Salesianos de Sarriá y ha presidido desde entonces la iglesia-santuario anexa al colegio.
La imagen de María Auxiliadora fue bendecida el 18 de julio de 1900 en la capilla-oratorio de San Luis, cercana al Colegio Salesiano, por el arcipreste Luis Fernández Casado. Este evento marcó el inicio de una serie de actos de devoción, que incluyeron un triduo en la Parroquia de Santiago Apóstol y una procesión hacia la iglesia de San Luis. Desde entonces, la imagen ha sido un referente espiritual para los montillanos.
"El himno del 125.º aniversario no solo celebra el pasado, sino que también mira hacia el futuro, reforzando la misión educativa y pastoral de la Casa Salesiana en Montilla", sostienen desde el centro educativo, convencidos de que "esta obra se convierte en un testimonio de la fe y el compromiso que los Salesianos han mantenido en Montilla a lo largo de más de un siglo".
La obra es fruto de la colaboración entre José María Luque Jurado, director musical de la Coral Montillana de Antiguos Alumnos de Don Bosco y del grupo Capachos, y el cordobés Nico Barrena. La creación conjunta de estos dos artistas ha dado como resultado una pieza musical que abraza el espíritu salesiano y la rica historia de la congregación en Montilla.
El himno, cuya grabación y masterización han sido realizadas por el propio Nico Barrena, cuenta con la voz principal de Fran Espejo Raya, acompañado en los coros por Isa Navarro Pecci y el propio Espejo Raya. El diseño del logotipo conmemorativo, obra de Manuel Alférez Hidalgo, complementa visualmente la obra, que cuenta también con un videoclip editado por Félix Contreras Luque.
"Queremos que lo escuches, que lo cantes, que lo compartas y que transmitas esa alegría salesiana que sale del corazón y que está llena de esperanza y de futuro", sostiene Mamen Sánchez Ruz, profesora de Infantil del Colegio Salesiano "San Francisco Solano".
Una historia más que centenaria
El vínculo de los Salesianos con Montilla comenzó en octubre de 1899, cuando la congregación se estableció en la casa de Teresa Enríquez, ubicada en el Llano de Palacio junto al singular arco de Santa Clara. No obstante, este primer emplazamiento sería temporal, ya que en 1900 se trasladaron a una nueva sede en la calle Tarasquilla, hoy conocida como Beato Miguel Molina.
Sin duda, un acontecimiento memorable en la flamante historia de la Casa Salesiana fue la llegada de la primera imagen de María Auxiliadora en mayo de 1900. Esta talla, costeada por Francisco de Alvear, conde de La Cortina, fue realizada en los Talleres Salesianos de Sarriá y ha presidido desde entonces la iglesia-santuario anexa al colegio.
La imagen de María Auxiliadora fue bendecida el 18 de julio de 1900 en la capilla-oratorio de San Luis, cercana al Colegio Salesiano, por el arcipreste Luis Fernández Casado. Este evento marcó el inicio de una serie de actos de devoción, que incluyeron un triduo en la Parroquia de Santiago Apóstol y una procesión hacia la iglesia de San Luis. Desde entonces, la imagen ha sido un referente espiritual para los montillanos.
"El himno del 125.º aniversario no solo celebra el pasado, sino que también mira hacia el futuro, reforzando la misión educativa y pastoral de la Casa Salesiana en Montilla", sostienen desde el centro educativo, convencidos de que "esta obra se convierte en un testimonio de la fe y el compromiso que los Salesianos han mantenido en Montilla a lo largo de más de un siglo".
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: J.P. BELLIDO
VÍDEO: SALESIANOS MONTILLA
FOTOGRAFÍA: J.P. BELLIDO
VÍDEO: SALESIANOS MONTILLA
