El Ministerio Fiscal solicita 17 años y nueve meses de prisión para un vecino de Montilla, conocido por sus amplios antecedentes penales, que a finales del año 2022 fue detenido como presunto autor del incendio que arrasó una vivienda de Protección Oficial ubicada en la calle Gabriel Celaya de Montilla, una vía que conecta la confluencia de las avenidas de Granada y Santa María con la unión de la calle Melgar y la Avenida del Marqués de la Vega de Armijo.
Tal y como informó en primicia Montilla Digital, el fuego se inició en torno a las 23.30 de la noche del 25 de diciembre de 2022 cuando, según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Fiscal –que adelantó ayer Pilar Cobos en Diario Córdoba–, el acusado profirió amenazas de muerte contra su pareja, toda vez que prendió fuego a unas cortinas con un mechero, provocando que las llamas se extendieran rápidamente por todo el domicilio, dejándose ver desde la calle Gabriel Celaya y desde la escalinata situada enfrente, que conecta con la calle Rafael Alberti.
Aunque el incendio no provocó heridos, "ni siquiera por inhalación de humo", los daños materiales fueron "muy cuantiosos", dado que la vivienda quedó "prácticamente arrasada", según confirmaron a Montilla Digital fuentes oficiales. De hecho, en la mañana del 26 de diciembre de 2022, el arquitecto municipal, Manuel Llamas, inspeccionó la vivienda junto a los bomberos y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para evaluar posibles daños estructurales en el edificio.
El escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía relata que el acusado y la víctima habían sido pareja y habían convivido en el mismo domicilio. De este modo, en la noche del 25 de diciembre de 2022, ambos discutieron y, según el Ministerio Público, el encartado profirió amenazas contra la mujer, diciéndole que "iba a ir a por ella, que iba a hacer daño a las personas que ella quería y que la iba a matar", lo que desencadenó que la mujer huyera de la vivienda, pese a los intentos del procesado por retenerla.
Tras ello, y siempre según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Fiscal, el acusado prendió fuego a las cortinas con un mechero, "a la vez que hablaba con su pareja y le enviaba mensajes de WhatsApp en los que le decía que le estaba quemando la casa".
El incendio se extendió rápidamente por el inmueble y afectó a otras viviendas colindantes de la misma calle Gabriel Celaya, "poniendo en peligro su vida e integridad, y la integridad física de las personas que se encontraban en el interior", según la Fiscalía.
El siniestro obligó a emplearse a fondo a tres dotaciones del Parque de Bomberos de Montilla, que se desplazaron rápidamente desde las instalaciones del Consorcio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios, ubicado en la Avenida del Marqués de la Vega de Armijo, a escasos tres minutos del lugar de los hechos.
Las llamas, visibles desde la calle Gabriel Celaya –una vía que discurre paralela a las calles Rafael Alberti y Pablo Neruda, en la conocida como Barriada de las 88 Viviendas– provocaron una densa columna de humo que se podía apreciar desde distintos puntos de Montilla y congregó a un gran número de vecinos a las puertas de la casa afectada, cuya puerta tuvo que ser derribada por los bomberos.
El Consorcio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios movilizó tres camiones-bomba y a seis bomberos que, tras derribar la puerta de la vivienda y sofocar las llamas, permanecieron más de una hora refrescando la zona afectada por el fuego.
El Ministerio Fiscal relata igualmente que cuando la Guardia Civil y la Policía Local acudieron al lugar de los hechos e instaron al acusado a deponer su actitud, "saltó desde el balcón de la casa" y, una vez que fue requerido por los agentes, "forcejeó oponiendo gran resistencia a la detención, a la vez que se daba cabezazos contra el cristal de la puerta del coche policial y vociferaba que lo iban a pagar".
Tal y como informó en primicia Montilla Digital, el fuego se inició en torno a las 23.30 de la noche del 25 de diciembre de 2022 cuando, según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Fiscal –que adelantó ayer Pilar Cobos en Diario Córdoba–, el acusado profirió amenazas de muerte contra su pareja, toda vez que prendió fuego a unas cortinas con un mechero, provocando que las llamas se extendieran rápidamente por todo el domicilio, dejándose ver desde la calle Gabriel Celaya y desde la escalinata situada enfrente, que conecta con la calle Rafael Alberti.
Aunque el incendio no provocó heridos, "ni siquiera por inhalación de humo", los daños materiales fueron "muy cuantiosos", dado que la vivienda quedó "prácticamente arrasada", según confirmaron a Montilla Digital fuentes oficiales. De hecho, en la mañana del 26 de diciembre de 2022, el arquitecto municipal, Manuel Llamas, inspeccionó la vivienda junto a los bomberos y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para evaluar posibles daños estructurales en el edificio.
El escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía relata que el acusado y la víctima habían sido pareja y habían convivido en el mismo domicilio. De este modo, en la noche del 25 de diciembre de 2022, ambos discutieron y, según el Ministerio Público, el encartado profirió amenazas contra la mujer, diciéndole que "iba a ir a por ella, que iba a hacer daño a las personas que ella quería y que la iba a matar", lo que desencadenó que la mujer huyera de la vivienda, pese a los intentos del procesado por retenerla.
Tras ello, y siempre según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Fiscal, el acusado prendió fuego a las cortinas con un mechero, "a la vez que hablaba con su pareja y le enviaba mensajes de WhatsApp en los que le decía que le estaba quemando la casa".
El incendio se extendió rápidamente por el inmueble y afectó a otras viviendas colindantes de la misma calle Gabriel Celaya, "poniendo en peligro su vida e integridad, y la integridad física de las personas que se encontraban en el interior", según la Fiscalía.
El siniestro obligó a emplearse a fondo a tres dotaciones del Parque de Bomberos de Montilla, que se desplazaron rápidamente desde las instalaciones del Consorcio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios, ubicado en la Avenida del Marqués de la Vega de Armijo, a escasos tres minutos del lugar de los hechos.
Las llamas, visibles desde la calle Gabriel Celaya –una vía que discurre paralela a las calles Rafael Alberti y Pablo Neruda, en la conocida como Barriada de las 88 Viviendas– provocaron una densa columna de humo que se podía apreciar desde distintos puntos de Montilla y congregó a un gran número de vecinos a las puertas de la casa afectada, cuya puerta tuvo que ser derribada por los bomberos.
El Consorcio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios movilizó tres camiones-bomba y a seis bomberos que, tras derribar la puerta de la vivienda y sofocar las llamas, permanecieron más de una hora refrescando la zona afectada por el fuego.
El Ministerio Fiscal relata igualmente que cuando la Guardia Civil y la Policía Local acudieron al lugar de los hechos e instaron al acusado a deponer su actitud, "saltó desde el balcón de la casa" y, una vez que fue requerido por los agentes, "forcejeó oponiendo gran resistencia a la detención, a la vez que se daba cabezazos contra el cristal de la puerta del coche policial y vociferaba que lo iban a pagar".
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR (ARCHIVO)
