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Qué es un sistema de bombeo y cuáles son sus componentes

Los sistemas de bombeo constituyen elementos clave dentro de los procesos productivos de muchas empresas. Su versatilidad y su elevado rendimiento permiten la extracción de todo tipo de recursos naturales. Pero, ¿qué son exactamente?


Cuando hablamos de un sistema de bombeo hablamos de una herramienta que permite la extracción de elementos o el acopio de sustancias líquidas a partir de una red de tuberías atendiendo a parámetros como el caudal o la presión.

Su funcionamiento se basa en el concepto de equilibrio hidráulico. Éste se logra gracias a un correcto balance de la energía cinética y potencial, así como de las fugas de energía que se producen de manera natural. En definitiva, podríamos decir que su principal finalidad es la transferencia de fluidos y la transformación de la energía suministrada por el motor en energía hidráulica.

Su estructura está integrada por dos componentes. Por un lado, la bomba y, por otro, un accionador. Éste puede adoptar la forma de un motor eléctrico o, por ejemplo, basado en la combustión interna. El método es bastante sencillo. Una vez pone en funcionamiento el accionador, la energía mecánica sufre un proceso de transición a energía cinética. Gracias a factores como la posición, la presión o la velocidad, se inicia un movimiento de arrastre que desplaza el fluido.

Tipos de sistemas de bombeo

En el mercado es posible identificar diferentes tipos de sistemas de bombeo, por ejemplo, puedes encontrar varios ejemplos en https://steknos.es/. Algunos de los más utilizados son:

Sistemas de bombeo centrífugo

Sus bombas integran un impulsor giratorio enlazado con un eje que, a su vez, está conectado a la fuente de energía. Cuando el impulsor se pone en funcionamiento incrementa la velocidad de desplazamiento del flujo de agua, conduciéndolo a través de una tubería. Los sistemas de bombeo centrífugos están desarrollados para hacer descender el nivel de caudal y transformar la velocidad en presión.

Sistemas de bombeo sumergibles

Están configurados para extraer agua de entornos herméticos como depósitos o piscinas. Trabajan a partir de la corriente eléctrica y basta con sumergirlos y ponerlos en funcionamiento. Este tipo de modelos suelen integrarse dentro de diferentes líneas de producto. A la hora de adquirirse deben valorarse sus prestaciones. No todos pueden trabajar a un mismo nivel de caudal y no todos están preparados para sumergirse a grandes profundidades por lo que es recomendable analizar en el entorno de trabajo antes de tomar una decisión de compra.

Sistemas de bombeo solares

Se ponen en funcionamiento a través de energía solar. Es posible encontrar diferentes modelos y gamas. Desde los más básicos para pequeños estanques y el contexto de la jardinería, hasta las alternativas más avanzadas que incluyen prestaciones basadas en tecnología artificial.

Además, también es posible encontrar otras alternativas o modalidades como las bombas de dosificación, las bombas de elevación, las bombas de caña o las bombas de lubricación. En general, todas (o la inmensa mayoría (de sistemas de bombeo) funcionan a través de los principios descritos anteriormente.

Para escoger la mejor alternativa, es recomendable valorar algunos aspectos generales. Por ejemplo, la altura de descarga, las pérdidas de carga o los obstáculos que existen en el área de trabajo, la disponibilidad o no de un depósito de descarga que pueda ejercer un efecto sobre la presión, la temperatura a la que estará expuesta la bomba o el caudal deseado.

Componentes de un sistema de bombeo

El interior de la bomba sumergible está integrado por elementos como:

Rodete

Es más común dentro de aquellos modelos que están destinados a drenar o extraer grandes superficies de agua o de extensión media. Están elaborados a base de acero inoxidable, aunque también es posible encontrar alternativas fabricadas con otros materiales como bronce o hierro. El rodete cumple la función de empujar el fluido a través del conducto.

Carcasa

En la mayor parte de las ocasiones está construida a base de hierro fundido, especialmente si la bomba estará destinada para trabajar con aguas potables. No obstante, cuando se utilizan para extraer otro tipo de fluidos (por ejemplo, sustancias químicas), está desaconsejado. En su lugar deberá optarse por acero inoxidable. El objetivo de la carcasa es servir como barrera protectora.

Tazones

Su estructura cilíndrica contrasta con la configuración del interior, integrada por diseños especiales que permiten amortiguar el impacto del agua.

Eje impulsor

Proporciona apoyo al impulsor facilitando los movimientos y giros.

Motor

Actúa como el detonador de movimiento. Propicia el desplazamiento del eje y al mismo tiempo el del impulsor para que el fluido pueda circular desde un punto hasta otro.

Retenedores

Su principal función es blindar la estructura de la bomba. Gracias a ellos se puede producir el fenómeno de compresión en el interior.

Panel de control

Se compone de botones para dar órdenes al motor. Los modelos más sencillos a menudo sólo disponen de un switch para apagar o encender la máquina. Las gamas más avanzadas cuentan con otros ajustes adicionales.

FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
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