El alumnado de 4º de la ESO del IES Emilio Canalejo Olmeda de Montilla ha celebrado la primera yincana Vivir y Sentir el Patrimonio, enmarcada dentro del proyecto de innovación educativa del centro, con la que se pretende fomentar el conocimiento del patrimonio local "desde un punto de vista vivencial".
Organizada por los alumnos de segundo del Ciclo Formativo de Grado Superior en Animación de Actividades Física y Deportivas, bajo la dirección del profesor Pedro Barbero Moraño, los tres grupos participantes han tenido que superar una decena de retos relacionados con monumentos y lugares emblemáticos que han sido diseñados por el profesor Antonio José Llamas Sicilia.
De esta manera, el alumnado ha tenido que resolver cuestiones de espacios patrimoniales como el castillo de Montilla, la parroquia de Santiago, la Casa del Inca Garcilaso o el convento de Santa Clara, así como de rincones urbanos como el barrio de La Escuchuela, la cruz del Arbón o el paseo de Cervantes.
Al finalizar cada reto, los grupos pasaban por el punto de control situado en la Plaza de la Rosa, donde además debían superar una prueba de carácter físico y lúdico antes de dirigirse hacia la resolución de un nuevo reto. Una vez finalizada la prueba, el grupo que superó todos los retos de manera correcta en el menor tiempo ha recibido un premio que ha sido entregado por el vicedirector del centro, Fernando Ramírez Aguado.
Organizada por los alumnos de segundo del Ciclo Formativo de Grado Superior en Animación de Actividades Física y Deportivas, bajo la dirección del profesor Pedro Barbero Moraño, los tres grupos participantes han tenido que superar una decena de retos relacionados con monumentos y lugares emblemáticos que han sido diseñados por el profesor Antonio José Llamas Sicilia.
De esta manera, el alumnado ha tenido que resolver cuestiones de espacios patrimoniales como el castillo de Montilla, la parroquia de Santiago, la Casa del Inca Garcilaso o el convento de Santa Clara, así como de rincones urbanos como el barrio de La Escuchuela, la cruz del Arbón o el paseo de Cervantes.
Al finalizar cada reto, los grupos pasaban por el punto de control situado en la Plaza de la Rosa, donde además debían superar una prueba de carácter físico y lúdico antes de dirigirse hacia la resolución de un nuevo reto. Una vez finalizada la prueba, el grupo que superó todos los retos de manera correcta en el menor tiempo ha recibido un premio que ha sido entregado por el vicedirector del centro, Fernando Ramírez Aguado.
"Los participantes han podido descubrir, desde la experiencia y de una manera divertida, una parte de la riqueza patrimonial de esta ciudad", ha destacado el profesor Llamas Sicilia, quien ha indicado que lo largo de este curso se están desarrollando numerosas actividades relacionadas con el conocimiento del patrimonio local y la concienciación entre la comunidad educativa de la importancia de su conservación.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL