Aguas de Montilla, empresa que gestiona el ciclo integral del agua en la localidad lleva a cabo a lo largo del año diferentes campañas de sensibilización para para sensibilizar a la población sobre los efectos negativos en la red de saneamiento y el medio ambiente que entraña la práctica de arrojar las toallitas higiénicas al inodoro, así como otros residuos sólidos.
Es por ello que, aprovechando el inicio del curso escolar, ha mandado una carta a los diferentes centros educativos de Montilla, así como a distintas instalaciones municipales, recordando el daño que produce este tipo de elementos, siendo el más habitual el caso de toallitas húmedas, tanto a las redes de saneamiento de la ciudad, provocando atascos y averías como al propio medio natural.
Precisamente las toallitas forman taponamientos en las redes de alcantarillado o bien en las estaciones de bombeo, poniendo en serio peligro el funcionamiento del sistema general de evacuación de aguas a lo que ahora se suman otros elementos como las mascarillas, solicitando responsabilidad para su eliminación segura y evitar los riesgos medioambientales de estos desechos. Estas cartas van acompañadas de carteles y materiales de sensibilización para poder difundir el mensaje en estas instalaciones y que el mensaje llegue a más personas.
Actos incívicos
Los habitantes de Montilla son cada vez más conscientes de la importancia de no desechar ciertas sustancias por el inodoro y las consecuencias que puede conllevar, según indica Aguas de Montilla, pero aún se detectan actos incívicos como la reciente obstrucción de algunos imbornales por arrojar desechos de construcción.
De esta forma desde Aguas de Montilla se solicita la correcta utilización de los imbornales, ya que el desecho de cemento, arena, mortero u otros componentes de construcción, puede provocar la inutilización de los imbornales creando graves problema en la evacuación de aguas en un periodo característico por las precipitaciones.
Por último, también se pide responsabilidad en la vía pública y la correcta utilización de contenedores y papeleras. Por la acción del viento y del agua de lluvia, los cartones, envoltorios, papeles, colillas, botellas, etc., tirados al suelo, pueden acabar en los caños o imbornales, en muchos casos cubriéndolos e impidiendo la entrada de agua y como consecuencia las calles corran el riesgo de inundarse en el caso de lluvia.
Como consecuencia de estas conductas incívicas, la labor de limpieza que se realiza de forma continua tenga menor incidencia que una buena concienciación ciudadana, y por ello se intensifican las labores en estas fechas para optimizar el trabajo realizado, en especial en las zonas conflictivas.
Es por ello que, aprovechando el inicio del curso escolar, ha mandado una carta a los diferentes centros educativos de Montilla, así como a distintas instalaciones municipales, recordando el daño que produce este tipo de elementos, siendo el más habitual el caso de toallitas húmedas, tanto a las redes de saneamiento de la ciudad, provocando atascos y averías como al propio medio natural.
Precisamente las toallitas forman taponamientos en las redes de alcantarillado o bien en las estaciones de bombeo, poniendo en serio peligro el funcionamiento del sistema general de evacuación de aguas a lo que ahora se suman otros elementos como las mascarillas, solicitando responsabilidad para su eliminación segura y evitar los riesgos medioambientales de estos desechos. Estas cartas van acompañadas de carteles y materiales de sensibilización para poder difundir el mensaje en estas instalaciones y que el mensaje llegue a más personas.
Actos incívicos
Los habitantes de Montilla son cada vez más conscientes de la importancia de no desechar ciertas sustancias por el inodoro y las consecuencias que puede conllevar, según indica Aguas de Montilla, pero aún se detectan actos incívicos como la reciente obstrucción de algunos imbornales por arrojar desechos de construcción.
De esta forma desde Aguas de Montilla se solicita la correcta utilización de los imbornales, ya que el desecho de cemento, arena, mortero u otros componentes de construcción, puede provocar la inutilización de los imbornales creando graves problema en la evacuación de aguas en un periodo característico por las precipitaciones.
Por último, también se pide responsabilidad en la vía pública y la correcta utilización de contenedores y papeleras. Por la acción del viento y del agua de lluvia, los cartones, envoltorios, papeles, colillas, botellas, etc., tirados al suelo, pueden acabar en los caños o imbornales, en muchos casos cubriéndolos e impidiendo la entrada de agua y como consecuencia las calles corran el riesgo de inundarse en el caso de lluvia.
Como consecuencia de estas conductas incívicas, la labor de limpieza que se realiza de forma continua tenga menor incidencia que una buena concienciación ciudadana, y por ello se intensifican las labores en estas fechas para optimizar el trabajo realizado, en especial en las zonas conflictivas.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
