El equipo de gobierno sacó anoche adelante su propuesta de ordenanzas fiscales para el ejercicio 2016, durante el transcurso de un pleno extraordinario que se celebró en el Ayuntamiento de Montilla. Antes del inicio de la sesión, el alcalde de la localidad, Rafael Llamas, subrayó que el Gobierno municipal pretende hacer posible un nivel de ingresos “razonable” que permita al Consistorio “ofrecer unos servicios públicos de calidad”.
“Son unas ordenanzas que responden a la necesidad de establecer unos ingresos que nos permitan desarrollar un presupuesto para el 2016 similar al del pasado año, es decir, en torno a los 17,3 millones de euros”, avanzó el primer edil montillano.
Las ordenanzas fiscales aprobadas anoche por la Corporación Municipal contemplan una congelación general de las tasas y precios públicos, si bien reducirán en un 6 por ciento la tasa por el servicio de recogida de basura, y en un 30 por ciento el impuesto de construcciones, "como medida para apoyar y generar estímulo en la construcción, un sector de la economía muy importante en nuestra ciudad, que genera muchos puestos de trabajo y que ha sufrido la crisis económica de manera notable", tal y como defendió la teniente de alcalde de Hacienda, Ana Rodríguez.
De igual modo, el Pleno acordó reducir en un 9 por ciento el tipo impositivo del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) de naturaleza urbana, para “paliar la subida del 10 por ciento que desde el Gobierno central se aplica a la valoración de los bienes e inmuebles”, destacó Rafael Llamas, quien hizo hincapié en que “gracias a esta medida, los ciudadanos no verán incrementado su recibo de contribución el próximo año”.
Además de reducir en un 9 por ciento el impuesto de Plusvalía, la Corporación Municipal acordó incrementar la bonificación de la que se benefician los edificios protegidos que acometen obras de rehabilitación del 50 al 95 por ciento. De igual manera, la propuesta de ordenanzas fiscales elaborada por el equipo de gobierno incluye autoliquidaciones en el impuesto de construcciones de obras menores, una medida que, según el alcalde, “posibilitará que las licencias de obras menores se autoricen en el mismo momento de su presentación, evitando esperas innecesarias a los ciudadanos”.
En lo que respecta a las tasas, los vecinos de Montilla verán reducir la cuota de su recibo de basura en un 6 por ciento, toda vez que se incrementará la tasa de obtención de licencia para obras mayores con proyecto. Por otro lado, la empresa mixta Aguas de Montilla incrementará el recibo en un 2 por ciento, tras una propuesta inicial superior al 5 por ciento, que fue rechazada por el consejo de administración, en el que está representado el propio Ayuntamiento.
Por su parte, la teniente de alcalde del Área Sociocultural, Conchi Espejo, indicó que las ordenanzas fiscales que anoche aprobó la Corporación Municipal “garantizan la prestación de unos servicios públicos de calidad, la atención al tejido asociativo montillano” y permitirán “apoyar actividades que fomenten la actividad económica como impulso para la creación de empleo”.
En ese sentido, Conchi Espejo defendió que “los impuestos deben ser progresivos, ya que son una necesidad para poder ofrecer servicios de calidad” y añadió que los integrantes del equipo de gobierno “no creemos en una bajada de impuestos sistemática porque cada vez son más las necesidades que tiene la ciudadanía”.
De otro lado, el portavoz de Comprometidos por Montilla, Luis López, recordó que Montilla se encuentra por encima de la media provincial en lo que a la carga impositiva del IBI se refiere, de ahí que planteara al equipo de gobierno la necesidad de "hacer un esfuerzo para, poco a poco, ir bajando este impuesto e ir adaptándolo" a las cifras que se barajan en otras localidades de la provincia.
El Grupo Municipal Popular, por su parte, volvió a tildar anoche de “propuesta engañosa” la bajada de impuestos que defendió el equipo de gobierno. "Si pretenden que se aumente el consumo no va a ser posible porque los ciudadanos no van a tener mayor capacidad adquisitiva", aseguró el concejal popular José Manuel Lucena, quien denunció que el Gobierno municipal “quiere convencer de que se bajan los impuestos cuando en realidad no es así”.
Al hilo de estas declaraciones, Rafael Llamas argumentó que “el PP confunde la bajada de impuestos con la presión fiscal a la que vienen sometiendo a las clases más desfavorecidas de la sociedad” y defendió que “los impuestos son una necesidad para poder dar servicios de calidad que repercutan en la ciudadanía en general”.
“Son unas ordenanzas que responden a la necesidad de establecer unos ingresos que nos permitan desarrollar un presupuesto para el 2016 similar al del pasado año, es decir, en torno a los 17,3 millones de euros”, avanzó el primer edil montillano.
Las ordenanzas fiscales aprobadas anoche por la Corporación Municipal contemplan una congelación general de las tasas y precios públicos, si bien reducirán en un 6 por ciento la tasa por el servicio de recogida de basura, y en un 30 por ciento el impuesto de construcciones, "como medida para apoyar y generar estímulo en la construcción, un sector de la economía muy importante en nuestra ciudad, que genera muchos puestos de trabajo y que ha sufrido la crisis económica de manera notable", tal y como defendió la teniente de alcalde de Hacienda, Ana Rodríguez.
De igual modo, el Pleno acordó reducir en un 9 por ciento el tipo impositivo del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) de naturaleza urbana, para “paliar la subida del 10 por ciento que desde el Gobierno central se aplica a la valoración de los bienes e inmuebles”, destacó Rafael Llamas, quien hizo hincapié en que “gracias a esta medida, los ciudadanos no verán incrementado su recibo de contribución el próximo año”.
Además de reducir en un 9 por ciento el impuesto de Plusvalía, la Corporación Municipal acordó incrementar la bonificación de la que se benefician los edificios protegidos que acometen obras de rehabilitación del 50 al 95 por ciento. De igual manera, la propuesta de ordenanzas fiscales elaborada por el equipo de gobierno incluye autoliquidaciones en el impuesto de construcciones de obras menores, una medida que, según el alcalde, “posibilitará que las licencias de obras menores se autoricen en el mismo momento de su presentación, evitando esperas innecesarias a los ciudadanos”.
En lo que respecta a las tasas, los vecinos de Montilla verán reducir la cuota de su recibo de basura en un 6 por ciento, toda vez que se incrementará la tasa de obtención de licencia para obras mayores con proyecto. Por otro lado, la empresa mixta Aguas de Montilla incrementará el recibo en un 2 por ciento, tras una propuesta inicial superior al 5 por ciento, que fue rechazada por el consejo de administración, en el que está representado el propio Ayuntamiento.
Por su parte, la teniente de alcalde del Área Sociocultural, Conchi Espejo, indicó que las ordenanzas fiscales que anoche aprobó la Corporación Municipal “garantizan la prestación de unos servicios públicos de calidad, la atención al tejido asociativo montillano” y permitirán “apoyar actividades que fomenten la actividad económica como impulso para la creación de empleo”.
En ese sentido, Conchi Espejo defendió que “los impuestos deben ser progresivos, ya que son una necesidad para poder ofrecer servicios de calidad” y añadió que los integrantes del equipo de gobierno “no creemos en una bajada de impuestos sistemática porque cada vez son más las necesidades que tiene la ciudadanía”.
De otro lado, el portavoz de Comprometidos por Montilla, Luis López, recordó que Montilla se encuentra por encima de la media provincial en lo que a la carga impositiva del IBI se refiere, de ahí que planteara al equipo de gobierno la necesidad de "hacer un esfuerzo para, poco a poco, ir bajando este impuesto e ir adaptándolo" a las cifras que se barajan en otras localidades de la provincia.
El Grupo Municipal Popular, por su parte, volvió a tildar anoche de “propuesta engañosa” la bajada de impuestos que defendió el equipo de gobierno. "Si pretenden que se aumente el consumo no va a ser posible porque los ciudadanos no van a tener mayor capacidad adquisitiva", aseguró el concejal popular José Manuel Lucena, quien denunció que el Gobierno municipal “quiere convencer de que se bajan los impuestos cuando en realidad no es así”.
Al hilo de estas declaraciones, Rafael Llamas argumentó que “el PP confunde la bajada de impuestos con la presión fiscal a la que vienen sometiendo a las clases más desfavorecidas de la sociedad” y defendió que “los impuestos son una necesidad para poder dar servicios de calidad que repercutan en la ciudadanía en general”.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
