El Papa Benedicto XVI recibió ayer en audiencia al sacerdote montillano José Almedina Polonio quien, en compañía del obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, y del escultor cordobés Marco-Augusto Dueñas, entregó al Pontífice una cruz pectoral diseñada por Ana Infante y labrada en oro por los plateros cordobeses hermanos Soto que contiene una reliquia del nuevo Doctor de la Iglesia Universal, San Juan de Ávila.
Durante el encuentro, que se produjo en la misma Plaza de San Pedro, el titular de la Diócesis tuvo la oportunidad de agradecer al Papa la proclamación de San Juan de Ávila como Doctor de la Iglesia Universal, a la par que le trasladó su invitación a visitar la Basílica Pontificia en la que se custodian los restos del asceta, nacido en la localidad manchega de Almodóvar del Campo y fallecido en Montilla el 10 de mayo de 1569.
“Santo Padre, han venido al Doctorado cien seminaristas diocesanos, casi un centenar de curas, varios cientos de peregrinos y las autoridades de Montilla. Toda la Diócesis de Córdoba le expresa su gratitud, quiere al Papa y reza por el Papa”, le comentó Demetrio Fernández, para concluir trasladándole su invitación a visitar el sepulcro de San Juan de Ávila en Montilla.
Previamente, el obispo había saludado a Benedicto XVI indicándole que en la Diócesis de Córdoba se halla el sepulcro del nuevo Doctor de la Iglesia, a lo que el Papa respondió: “Sí, y además San Juan de Ávila es sacerdote diocesano de la Diócesis de Córdoba”.
A continuación, el obispo presentó al rector de la Basílica Pontificia, el sacerdote montillano José Almedina Polonio, que llevaba en sus manos una cruz pectoral que fue obsequiada a Benedicto XVI. “Nos gustaría vérsela puesta”, le confesó Demetrio Fernández, quien minutos después aseguró que “cuando veamos aparecer al Papa con esta cruz pectoral regalo de la Diócesis de Córdoba, pensaremos que el Papa lleva a los cordobeses junto a su corazón y seguiremos encomendándole ante el nuevo Doctor de la Iglesia universal, San Juan de Ávila”.
El Papa, por su parte, expresó visiblemente su admiración, al ver esta cruz con un diseño exclusivo en cuyo anverso aparece Cristo crucificado y, en el reverso, el sello de San Juan de Ávila, seguido de la inscripción “Sepan todos que nuestro Dios es amor”, una frase del propio asceta. Además, en el crucero, va incrustada una reliquia del esternón del Maestro de Santos con esmalte blanco y, más abajo, una efigie de San Juan de Ávila con su firma y la inscripción Doctor Ecclesiae, 7-X-2012, rematando en la parte inferior con el escudo de la Basílica Pontificia de Montilla.
Por último, el escultor cordobés Marco-Augusto Dueñas entregó al Papa una pequeña efigie de San Juan de Ávila, que es una réplica a escala de la que puede verse en la Basílica Pontificia de la calle Corredera. Al verla, el Papa pidió que la llevaran a su apartamento personal, manifestando de esta manera que quería tenerla cerca.
Montilla, a la espera de la apertura del 'Año Jubilar'
Montilla se convertirá a partir de mañana en "epicentro de peregrinaciones". Eso es lo que espera el Obispado de la solemne apertura del Año Jubilar Avilista que se desarrollará en la localidad desde mañana hasta el 19 de octubre de 2013, periodo en el que se va a celebrar un "año de gracia especial" junto al sepulcro del nuevo Doctor de la Iglesia Universal.
"Será un Año Jubilar que arrancará con una procesión por primera vez del Santo Maestro por las calles de la localidad, acompañada por la urna de sus reliquias, desde la parroquia de Santiago hasta la plaza de la Rosa, a las 17.30 de la tarde", precisaron fuentes del Obispado, para añadir que "una vez llegados a la plaza, a las 19.00 de la tarde, se celebrará la Santa Misa presidida por el obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández y, después, seguirá la procesión hasta la Basílica Pontificia, donde el prelado abrirá oficialmente la puerta del templo jubilar". A partir de este momento, Montilla será un "lugar de peregrinaciones constantes" para visitar los lugares avilistas y para venerar el sepulcro del patrón del clero secular español.
Durante el encuentro, que se produjo en la misma Plaza de San Pedro, el titular de la Diócesis tuvo la oportunidad de agradecer al Papa la proclamación de San Juan de Ávila como Doctor de la Iglesia Universal, a la par que le trasladó su invitación a visitar la Basílica Pontificia en la que se custodian los restos del asceta, nacido en la localidad manchega de Almodóvar del Campo y fallecido en Montilla el 10 de mayo de 1569.
“Santo Padre, han venido al Doctorado cien seminaristas diocesanos, casi un centenar de curas, varios cientos de peregrinos y las autoridades de Montilla. Toda la Diócesis de Córdoba le expresa su gratitud, quiere al Papa y reza por el Papa”, le comentó Demetrio Fernández, para concluir trasladándole su invitación a visitar el sepulcro de San Juan de Ávila en Montilla.
Previamente, el obispo había saludado a Benedicto XVI indicándole que en la Diócesis de Córdoba se halla el sepulcro del nuevo Doctor de la Iglesia, a lo que el Papa respondió: “Sí, y además San Juan de Ávila es sacerdote diocesano de la Diócesis de Córdoba”.
A continuación, el obispo presentó al rector de la Basílica Pontificia, el sacerdote montillano José Almedina Polonio, que llevaba en sus manos una cruz pectoral que fue obsequiada a Benedicto XVI. “Nos gustaría vérsela puesta”, le confesó Demetrio Fernández, quien minutos después aseguró que “cuando veamos aparecer al Papa con esta cruz pectoral regalo de la Diócesis de Córdoba, pensaremos que el Papa lleva a los cordobeses junto a su corazón y seguiremos encomendándole ante el nuevo Doctor de la Iglesia universal, San Juan de Ávila”.
El Papa, por su parte, expresó visiblemente su admiración, al ver esta cruz con un diseño exclusivo en cuyo anverso aparece Cristo crucificado y, en el reverso, el sello de San Juan de Ávila, seguido de la inscripción “Sepan todos que nuestro Dios es amor”, una frase del propio asceta. Además, en el crucero, va incrustada una reliquia del esternón del Maestro de Santos con esmalte blanco y, más abajo, una efigie de San Juan de Ávila con su firma y la inscripción Doctor Ecclesiae, 7-X-2012, rematando en la parte inferior con el escudo de la Basílica Pontificia de Montilla.
Por último, el escultor cordobés Marco-Augusto Dueñas entregó al Papa una pequeña efigie de San Juan de Ávila, que es una réplica a escala de la que puede verse en la Basílica Pontificia de la calle Corredera. Al verla, el Papa pidió que la llevaran a su apartamento personal, manifestando de esta manera que quería tenerla cerca.
Montilla, a la espera de la apertura del 'Año Jubilar'
Montilla se convertirá a partir de mañana en "epicentro de peregrinaciones". Eso es lo que espera el Obispado de la solemne apertura del Año Jubilar Avilista que se desarrollará en la localidad desde mañana hasta el 19 de octubre de 2013, periodo en el que se va a celebrar un "año de gracia especial" junto al sepulcro del nuevo Doctor de la Iglesia Universal.
"Será un Año Jubilar que arrancará con una procesión por primera vez del Santo Maestro por las calles de la localidad, acompañada por la urna de sus reliquias, desde la parroquia de Santiago hasta la plaza de la Rosa, a las 17.30 de la tarde", precisaron fuentes del Obispado, para añadir que "una vez llegados a la plaza, a las 19.00 de la tarde, se celebrará la Santa Misa presidida por el obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández y, después, seguirá la procesión hasta la Basílica Pontificia, donde el prelado abrirá oficialmente la puerta del templo jubilar". A partir de este momento, Montilla será un "lugar de peregrinaciones constantes" para visitar los lugares avilistas y para venerar el sepulcro del patrón del clero secular español.
REDACCIÓN / MONTILLA DIGITAL
