Los ánimos están calientes; los acontecimientos, muy frescos; y las circunstancias, muy enrarecidas. Ello puede ser razón más que suficiente para desviarse de la objetividad y no ver claramente, pero lo intentaré. He hablado con personas cercanas a los alumnos del IES Luis Vives de Valencia. He recogido información de prensa de derecha e izquierda. Como siempre, hay medias verdades en todos los diarios. Plantearé, por tanto, un análisis variado y plural. Este tipo de trabajo ya lo realizaba con mis alumnos desde hace tiempo y era instructivo. Os invito a hacerlo. Es fácil de desarrollar.
Voy a intentar relatar hechos concretos. Los alumnos del IES Luis Vives, situado en pleno centro de Valencia, llevaban algún tiempo manifestándose a las puertas del centro al terminar la última clase de la mañana. “Corte de tráfico de 10 minutos cada miércoles desde el 25 de enero frente al instituto. Eran entre 30 y 40 alumnos que se manifestaban pacíficamente, según el relato leído por un grupo de padres de alumnos y estudiantes, donde han empezado y acabado las cinco jornadas de protestas y cargas policiales, con estudiantes detenidos y decenas de lesionados”.
Estamos hablando de cómo una protesta simbólica, inocente, pero necesaria, se convierte en una guerra. Y, claro, toda guerra tiene su enemigo. Añado esto con toda la ironía de la que soy capaz. ¿La política corrompe todo lo que toca? En este caso, me atrevo a afirmar que sí.
Es injusta y procaz la visión que da la prensa de derechas cuando afirma que los profesores han instigado a los chavales a que se manifiesten con la promesa de obtener un aprobado general. Este tipo de patrañas solo consiguen enervar más al personal y desprestigiar a un colectivo que ya está bastante vapuleado social y políticamente. No puedo descartar que alguien haya planteado algo en este sentido, pero ¡seamos serios!
Los alumnos del Vives protestaban por la calidad de la enseñanza y contra los recortes. Ellos no han sufrido cortes de nada, afortunadamente. Las cuentas de este IES están saneadas y con superávit por el momento. No pasa lo mismo en otros centros públicos.
Breves cortes de tráfico, algunas pancartas y sus voces eran los elementos utilizados. El miércoles 15, la manifestación se agigantó con gente ajena al centro. La policía cargó contra ellos y el Consejo Escolar denunció malos tratos por parte de la fuerza pública.
Se convoca una manifestación de padres y alumnos para el día 16 a propuesta del Consejo Escolar en la que se pretende cortar al tráfico la calle San Vicente, una de las arterias circulatorias del centro urbano.
A esta manifestación es a la que se unen Compromis, IU, PSOE y Los Verdes, más los añadidos “revienta manifestaciones”. Y ¡aquí fue Troya! La policía cargó de lo lindo contra todo semoviente: alumnos, padres, políticos, antisistema... ¿Quién pagó el pato? Los inexpertos alumnos del instituto, al quedarse solos en primera línea de ataque.
Que la policía se pasó, es un hecho no discutible a estas alturas. Esta misma policía zahería a los jóvenes para que se enrabiaran y atacaran. Que ello ha venido muy bien para pedir la dimisión de la delegada del Gobierno, es un hecho constatado. Que la delegada del Gobierno no ha estado a la altura que se le exigía, eso parece. Que las declaraciones del mando policial fueron contraproducentes e inapropiadas, también. Al igual que de los 45 detenidos, solo uno es del IES Luis Vives. Parece ser que hay en prensa fotos “falsas”. Son de otras manifestaciones y otros momentos.
Quiero dejar muy claro, en deferencia a un padre de alumna de ese centro, que en esa manifestación había alumnos del IES y “todos los demás”. Quiero transmitir también, de forma palmaria, que los alumnos del instituto de ninguna manera son los “enemigos” de la policía -por supuesto, ningún ciudadano debiera serlo-. La impresión que subyace en todo el “bochinche” de la Semana Gris de Valencia es que se ha manipulado desde todas partes. Solo parece que se salva la mayoría de alumnos del Vives.
Que la enseñanza está viviendo las estrecheces económicas a las que nos han abocado una época de bonanza y despilfarro, no es un secreto para nadie. Que la autonomía valenciana está en bancarrota, tampoco es desconocido. Como también es cierto que no hay una oposición capacitada para tomar el mando: eso es lo que se puede deducir de lo que vota el pueblo.
A las manifestaciones de los alumnos del IES Luis Vives se han unido las fuerzas de izquierda y, con ellas, los tábanos que siempre aparecen allí donde hay movimiento contra el sistema. Dichos moscardones terminan por irritar la piel de todo lo que van picando, sean pacíficos alumnos de instituto, policía o personal que pasaba por allí. Los tábanos pican una y otra vez, provocan, insultan... En pocas palabras: revientan la situación.
Este tipo de concentraciones -que, en principio, son pacíficas- se tornan violentas por culpa de los radicales antisistema que suelen pasar valientemente a segunda fila cuando ataca la policía. Y en este caso, como en tantos otros, los platos rotos los acaban pagando alumnos pardillos e inexpertos. Aplico estos calificativos con todo mi cariño hacia ellos.
La mañana de la sobrecarga policial aparecen por el escenario todas las fuerzas de izquierda (Compromis, IU, PSOE…) y, con ellos, gente que no es estudiante, al menos del citado instituto y los tábanos explota-manifestaciones. Y la realidad se magnifica.
¿Se esperaba la policía esta situación y, por ello, cargan contundentemente contra todo bicho viviente? Seguramente. ¿El desbordamiento de los acontecimientos es una consecuencia de la presencia de las fuerzas políticas? ¿O tal vez la fuerza pública aumenta porque se espera una situación complicada? Piensen lo que crean mejor.
El resultado es un desmadre total: heridos, detenidos, aporreados a diestro y siniestro... Una señora es herida de un botellazo. Los alumnos no suelen llevar botellas. ¿Quiénes ganan? Los instigadores de guante blanco que encuentra un maravilloso caldo de cultivo para desestabilizar. ¿Quién pierde? Lamentablemente, el alumnado del IES Luis Vives, la democracia y la sociedad valenciana en general.
¿Este puede ser el aviso de unas Fallas muy calientes, hasta el punto de lograr que ardan antes de tiempo? Al rojo vivo sí que estarán, sobre todo las “mascletàs”, que se celebran al costado del IES. El 15-M, desde hace algún tiempo, está introduciéndose en algunas comisiones falleras con el propósito de “regenerar” el tejido reivindicativo vecinal.
Da pavor ver algunos de los videos colgados en Internet en los que la policía aplastante e inmisericorde aporrea a unos y otros. La policía también recibió agresiones. Asimismo, da cierto miedo algún que otro video en el que el presidente de la Federación Valenciana de Estudiantes arenga al personal y clama que si no se consigue lo que piden “iremos a sangre y fuego”. En la prensa del sábado dice que fue una manera de hablar.
La olla se ha puesto a bullir antes de lo que los sindicatos querían -o, tal vez, este es el resultado palmario de su “cándido” anuncio, no lo sé-. La soflama ya está en marcha. Los sindicatos han conseguido su objetivo. Estamos a un tiro de piedra de la huelga general y esto aún no ha empezado. Botón de muestra son las manifestaciones que recorrieron el pasado sábado el país.
Entresaco algunos titulares de prensa de estos días como botón de muestra y, cada cual, que busque y compare. Por comodidad, facilito la dirección de los mismos para quien quiera leer más detenidamente (basta con picar sobre el título).
Junto a los títulos, ofrezco una breve información alusiva a los mismos. Algunos titulares pueden brindar un suculento comentario, pero no hay espacio y no debo hacerlo yo. Lo que haya de media verdad o mentira a medias en dicha información se me escapa. Cada cual que saque las conclusiones y consecuencias que le parezcan más oportunas.
Compromís registró 48 horas antes la web que alentó las protestas, titular de Las Provincias, periódico regional a la derecha: “El sábado 18 de febrero, 48 horas antes de los graves altercados del lunes, se registró primaveravalencia, web convertida luego en el hashtag (etiqueta) #primaveravalencia y que ha sido trending topic mundial en twitter. Detrás de esta operación aparentemente improvisada se encuentra la coalición Compromís, en cuyo servidor está ubicada esa web que ha servido para avivar las revueltas. Desde el sábado, cargos del partido han llamando a una movilización que el lunes derivó en violencia”.
De flores a insultos en 8 meses, dice El Levante-EMV, diario regional a la izquierda: “Los antidisturbios son los mismos, lo que cambian son las órdenes que da Delegación de Gobierno. -Lo que no se puede hacer es matar las moscas a cañonazos-, añade el representante del sindicato del CNP. Opina que -restablecer una calle al tráfico-, era menos importante que provocar un clima de crispación que es más perjudicial para la convivencia”.
El argumentario del PP sostiene que “las manifestaciones son ilegales”, dice El País: “El PP asegura que estas manifestaciones no se han comunicado en ningún momento y, por lo tanto, son ilegales y que cortar el tráfico es delito”.
El arma del enemigo es un libro, dice El País del día 21: “Eso era todo: un libro, un folio, unos apuntes… Entre los miles de concentrados, no hubo “terroristas” ni “pasamontañas”, ni contenedores quemados. Tampoco hubo policía”.
El origen de las protestas estudiantiles en Valencia y las claves de una semana de tensión, dice 20minutos.es: "Desde abril de 2011, los colegios han sufrido los impagos de la Generalitat. Algunos centros no tenían calefacción, tizas o no podían hacer fotocopias".
Equo registró antes de las cargas el dominio primaveravalenciana, dice ABC: “La página web fue registrada por el mismo administrador de la web de la coalición de izquierdas Compromís. Las convocatorias de las protestas se articularon a través de redes sociales, convertidas en un auténtico hervidero”.
«No somos 'enemigos', somos estudiantes, hijos de trabajadores y también de policías», publica ABC: "Alberto Ordóñez en ABC Punto Radio: “hubo violencia policial contra estudiantes no violentos, padres y madres que no tenían nada que ver y contra viandantes”.
Todo partió de 30 alumnos y un corte pacífico, dice Levante-EMV: “A estas alturas del conflicto, los alumnos de Secundaria del Luis Vives están "cansados, sin saber qué está pasando y muy asustados" aseguró Pura, una madre".
Enlaces de interés
Postdata: Quiero agradecer a Ortifus el uso de las viñetas proporcionadas por un padre del IES Luis Vives
Voy a intentar relatar hechos concretos. Los alumnos del IES Luis Vives, situado en pleno centro de Valencia, llevaban algún tiempo manifestándose a las puertas del centro al terminar la última clase de la mañana. “Corte de tráfico de 10 minutos cada miércoles desde el 25 de enero frente al instituto. Eran entre 30 y 40 alumnos que se manifestaban pacíficamente, según el relato leído por un grupo de padres de alumnos y estudiantes, donde han empezado y acabado las cinco jornadas de protestas y cargas policiales, con estudiantes detenidos y decenas de lesionados”.
Estamos hablando de cómo una protesta simbólica, inocente, pero necesaria, se convierte en una guerra. Y, claro, toda guerra tiene su enemigo. Añado esto con toda la ironía de la que soy capaz. ¿La política corrompe todo lo que toca? En este caso, me atrevo a afirmar que sí.
Es injusta y procaz la visión que da la prensa de derechas cuando afirma que los profesores han instigado a los chavales a que se manifiesten con la promesa de obtener un aprobado general. Este tipo de patrañas solo consiguen enervar más al personal y desprestigiar a un colectivo que ya está bastante vapuleado social y políticamente. No puedo descartar que alguien haya planteado algo en este sentido, pero ¡seamos serios!
Los alumnos del Vives protestaban por la calidad de la enseñanza y contra los recortes. Ellos no han sufrido cortes de nada, afortunadamente. Las cuentas de este IES están saneadas y con superávit por el momento. No pasa lo mismo en otros centros públicos.
Breves cortes de tráfico, algunas pancartas y sus voces eran los elementos utilizados. El miércoles 15, la manifestación se agigantó con gente ajena al centro. La policía cargó contra ellos y el Consejo Escolar denunció malos tratos por parte de la fuerza pública.
Se convoca una manifestación de padres y alumnos para el día 16 a propuesta del Consejo Escolar en la que se pretende cortar al tráfico la calle San Vicente, una de las arterias circulatorias del centro urbano.
A esta manifestación es a la que se unen Compromis, IU, PSOE y Los Verdes, más los añadidos “revienta manifestaciones”. Y ¡aquí fue Troya! La policía cargó de lo lindo contra todo semoviente: alumnos, padres, políticos, antisistema... ¿Quién pagó el pato? Los inexpertos alumnos del instituto, al quedarse solos en primera línea de ataque.
Que la policía se pasó, es un hecho no discutible a estas alturas. Esta misma policía zahería a los jóvenes para que se enrabiaran y atacaran. Que ello ha venido muy bien para pedir la dimisión de la delegada del Gobierno, es un hecho constatado. Que la delegada del Gobierno no ha estado a la altura que se le exigía, eso parece. Que las declaraciones del mando policial fueron contraproducentes e inapropiadas, también. Al igual que de los 45 detenidos, solo uno es del IES Luis Vives. Parece ser que hay en prensa fotos “falsas”. Son de otras manifestaciones y otros momentos.
Quiero dejar muy claro, en deferencia a un padre de alumna de ese centro, que en esa manifestación había alumnos del IES y “todos los demás”. Quiero transmitir también, de forma palmaria, que los alumnos del instituto de ninguna manera son los “enemigos” de la policía -por supuesto, ningún ciudadano debiera serlo-. La impresión que subyace en todo el “bochinche” de la Semana Gris de Valencia es que se ha manipulado desde todas partes. Solo parece que se salva la mayoría de alumnos del Vives.
Que la enseñanza está viviendo las estrecheces económicas a las que nos han abocado una época de bonanza y despilfarro, no es un secreto para nadie. Que la autonomía valenciana está en bancarrota, tampoco es desconocido. Como también es cierto que no hay una oposición capacitada para tomar el mando: eso es lo que se puede deducir de lo que vota el pueblo.
A las manifestaciones de los alumnos del IES Luis Vives se han unido las fuerzas de izquierda y, con ellas, los tábanos que siempre aparecen allí donde hay movimiento contra el sistema. Dichos moscardones terminan por irritar la piel de todo lo que van picando, sean pacíficos alumnos de instituto, policía o personal que pasaba por allí. Los tábanos pican una y otra vez, provocan, insultan... En pocas palabras: revientan la situación.
Este tipo de concentraciones -que, en principio, son pacíficas- se tornan violentas por culpa de los radicales antisistema que suelen pasar valientemente a segunda fila cuando ataca la policía. Y en este caso, como en tantos otros, los platos rotos los acaban pagando alumnos pardillos e inexpertos. Aplico estos calificativos con todo mi cariño hacia ellos.
La mañana de la sobrecarga policial aparecen por el escenario todas las fuerzas de izquierda (Compromis, IU, PSOE…) y, con ellos, gente que no es estudiante, al menos del citado instituto y los tábanos explota-manifestaciones. Y la realidad se magnifica.
¿Se esperaba la policía esta situación y, por ello, cargan contundentemente contra todo bicho viviente? Seguramente. ¿El desbordamiento de los acontecimientos es una consecuencia de la presencia de las fuerzas políticas? ¿O tal vez la fuerza pública aumenta porque se espera una situación complicada? Piensen lo que crean mejor.
El resultado es un desmadre total: heridos, detenidos, aporreados a diestro y siniestro... Una señora es herida de un botellazo. Los alumnos no suelen llevar botellas. ¿Quiénes ganan? Los instigadores de guante blanco que encuentra un maravilloso caldo de cultivo para desestabilizar. ¿Quién pierde? Lamentablemente, el alumnado del IES Luis Vives, la democracia y la sociedad valenciana en general.
¿Este puede ser el aviso de unas Fallas muy calientes, hasta el punto de lograr que ardan antes de tiempo? Al rojo vivo sí que estarán, sobre todo las “mascletàs”, que se celebran al costado del IES. El 15-M, desde hace algún tiempo, está introduciéndose en algunas comisiones falleras con el propósito de “regenerar” el tejido reivindicativo vecinal.
Da pavor ver algunos de los videos colgados en Internet en los que la policía aplastante e inmisericorde aporrea a unos y otros. La policía también recibió agresiones. Asimismo, da cierto miedo algún que otro video en el que el presidente de la Federación Valenciana de Estudiantes arenga al personal y clama que si no se consigue lo que piden “iremos a sangre y fuego”. En la prensa del sábado dice que fue una manera de hablar.
La olla se ha puesto a bullir antes de lo que los sindicatos querían -o, tal vez, este es el resultado palmario de su “cándido” anuncio, no lo sé-. La soflama ya está en marcha. Los sindicatos han conseguido su objetivo. Estamos a un tiro de piedra de la huelga general y esto aún no ha empezado. Botón de muestra son las manifestaciones que recorrieron el pasado sábado el país.
Entresaco algunos titulares de prensa de estos días como botón de muestra y, cada cual, que busque y compare. Por comodidad, facilito la dirección de los mismos para quien quiera leer más detenidamente (basta con picar sobre el título).
Junto a los títulos, ofrezco una breve información alusiva a los mismos. Algunos titulares pueden brindar un suculento comentario, pero no hay espacio y no debo hacerlo yo. Lo que haya de media verdad o mentira a medias en dicha información se me escapa. Cada cual que saque las conclusiones y consecuencias que le parezcan más oportunas.
Compromís registró 48 horas antes la web que alentó las protestas, titular de Las Provincias, periódico regional a la derecha: “El sábado 18 de febrero, 48 horas antes de los graves altercados del lunes, se registró primaveravalencia, web convertida luego en el hashtag (etiqueta) #primaveravalencia y que ha sido trending topic mundial en twitter. Detrás de esta operación aparentemente improvisada se encuentra la coalición Compromís, en cuyo servidor está ubicada esa web que ha servido para avivar las revueltas. Desde el sábado, cargos del partido han llamando a una movilización que el lunes derivó en violencia”.
De flores a insultos en 8 meses, dice El Levante-EMV, diario regional a la izquierda: “Los antidisturbios son los mismos, lo que cambian son las órdenes que da Delegación de Gobierno. -Lo que no se puede hacer es matar las moscas a cañonazos-, añade el representante del sindicato del CNP. Opina que -restablecer una calle al tráfico-, era menos importante que provocar un clima de crispación que es más perjudicial para la convivencia”.
El argumentario del PP sostiene que “las manifestaciones son ilegales”, dice El País: “El PP asegura que estas manifestaciones no se han comunicado en ningún momento y, por lo tanto, son ilegales y que cortar el tráfico es delito”.
El arma del enemigo es un libro, dice El País del día 21: “Eso era todo: un libro, un folio, unos apuntes… Entre los miles de concentrados, no hubo “terroristas” ni “pasamontañas”, ni contenedores quemados. Tampoco hubo policía”.
El origen de las protestas estudiantiles en Valencia y las claves de una semana de tensión, dice 20minutos.es: "Desde abril de 2011, los colegios han sufrido los impagos de la Generalitat. Algunos centros no tenían calefacción, tizas o no podían hacer fotocopias".
Equo registró antes de las cargas el dominio primaveravalenciana, dice ABC: “La página web fue registrada por el mismo administrador de la web de la coalición de izquierdas Compromís. Las convocatorias de las protestas se articularon a través de redes sociales, convertidas en un auténtico hervidero”.
«No somos 'enemigos', somos estudiantes, hijos de trabajadores y también de policías», publica ABC: "Alberto Ordóñez en ABC Punto Radio: “hubo violencia policial contra estudiantes no violentos, padres y madres que no tenían nada que ver y contra viandantes”.
Todo partió de 30 alumnos y un corte pacífico, dice Levante-EMV: “A estas alturas del conflicto, los alumnos de Secundaria del Luis Vives están "cansados, sin saber qué está pasando y muy asustados" aseguró Pura, una madre".
Enlaces de interés
- Educar a porrazos no es bueno
- Libertad provisional para los 12 arrestados el lunes en la protesta estudiantil
- http://www.levante-emv.com/comunitat-valenciana/2012/02/22/compromis-compro-direccion-web-primaveravalencianacom/883384.html
- Las mentiras sobre la “primavera valenciana”
- #PrimaveraValenciana i primaveravalenciana.com (en valenciano)
- #PrimaveraValenciana
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PEPE CANTILLO
