Más de ochenta montillanos han peregrinado esta noche hasta Montalbán de Córdoba para rendir culto a Jesús del Calvario, una de las imágenes devocionales más importantes de la provincia de Córdoba. La actividad, que ha sido promovida por el portal informativo Montilla Cofrade, junto a las hermandades de Jesús Nazareno y de la Humildad, se ha celebrado en la víspera de la Fiesta de la Transfiguración del Señor y ha permitido a una amplia delegación montillana visitar la característica Ermita del Calvario, situada en uno de los accesos al municipio.
La comitiva montillana, formada por peregrinos de todas las edades, partió poco después de las 20.30 de la tarde, desde la iglesia de San Agustín, donde se rinde culto al Señor de Montilla, Nuestro Padre Jesús Nazareno, que presenta una iconografía similar a la popular imagen montalbeña.
La peregrinación ha cubierto a pie un trayecto de unos catorce kilómetros, marcados por el extraordinario ambiente familiar, la devoción y el fervor de un grupo que alcanzó su destino poco antes de la medianoche, cuando fue recibido por la hermandad matriz.
La actividad, que ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Montilla y de Mundaeventos, ha permitido rendir culto al Señor de la Campiña, una de las imágenes devocionales más relevantes de la comarca que, anoche, recibió la visita de miles de peregrinos procedentes de toda la geografía nacional.
Tanto la Franciscana Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia, María Santísima de la Caridad en sus Tristezas y San Francisco Solano, como la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores, en colaboración con Montilla Cofrade, han querido rememorar la estrecha vinculación entre la localidad de Montilla y Jesús del Calvario que, según reza un exvoto, salvó a los montillanos de la epidemia amarilla en 1805 tras haberse encomendado a la milagrosa imagen de Montalbán.
Año tras año, numerosos montillanos peregrinan en la noche de la Transfiguración del Señor hasta la Ermita de Jesús del Calvario y, en esta ocasión, Montilla Cofrade, junto a las hermandades de Jesús Nazareno y de la Humildad, han organizado una actividad para facilitar la realización de este camino en hermandad.
Desde el portal de información cofrade han querido agradecer públicamente a ambas hermandades su "total predisposición", así como a Mundaventos por la cesión de material; a AMT Laser por la realización de unos recuerdos para los asistentes; a Viajes Realia Tour por el servicio de autobús; "al Ayuntamiento de Montilla por su completa predisposición con el desarrollo de la actividad y, cómo no, a la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Calvario por recibir con los brazos abiertos a la delegación montillana".
Aunque no hay datos exactos sobre la fecha en la que la imagen de Nuestro Padre Jesús del Calvario llegó a Montalbán de Córdoba, lo que es seguro es que lleva más de cuatro siglos recibiendo culto en el municipio ajero y melonero por excelencia.
Según los datos que maneja la propia hermandad, que no se constituyó hasta el año 1776, la imagen pudo recalaren Montalbán entre 1590 y 1600, un siglo antes de la edificación de la primera Ermita del Calvario en el paraje de Las Chorreras. Sin embargo, el empleo de materiales de escasa calidad durante su construcción llevaron al templo a un estado ruinoso, lo que obligó a planificar un nuevo lugar de culto.
De este modo, el 8 de septiembre de 1776 se inauguró la segunda ermita, que tampoco corrió mejor suerte que la anterior. No en vano, a finales de marzo de 1852, tanto la linterna como la cúpula del templo se desplomaron, por lo que se decidió demoler por completo el edificio y reedificarlo desde los cimientos, concluyendo las obras en julio de 1856.
La imagen de Jesús del Calvario se ubicó en su nueva ermita el 25 de agosto de 1856, en una jornada festiva en la que no faltaron los repiques de campanas, los arcos triunfales, las colgaduras en los edificios e, incluso, una iluminación especial que engalanó buena parte de la localidad.
El Señor de la Campiña es una imagen anónima, de tamaño natural y talla completa, que cuenta con brazos articulados. Sus facciones góticas hacen pensar que cuenta con una mayor antigüedad que el resto de imágenes nazarenas de la comarca, aunque la hermandad sitúa su hechura en el último tercio del siglo XVI.
La comitiva montillana, formada por peregrinos de todas las edades, partió poco después de las 20.30 de la tarde, desde la iglesia de San Agustín, donde se rinde culto al Señor de Montilla, Nuestro Padre Jesús Nazareno, que presenta una iconografía similar a la popular imagen montalbeña.
La peregrinación ha cubierto a pie un trayecto de unos catorce kilómetros, marcados por el extraordinario ambiente familiar, la devoción y el fervor de un grupo que alcanzó su destino poco antes de la medianoche, cuando fue recibido por la hermandad matriz.
La actividad, que ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Montilla y de Mundaeventos, ha permitido rendir culto al Señor de la Campiña, una de las imágenes devocionales más relevantes de la comarca que, anoche, recibió la visita de miles de peregrinos procedentes de toda la geografía nacional.
Tanto la Franciscana Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia, María Santísima de la Caridad en sus Tristezas y San Francisco Solano, como la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores, en colaboración con Montilla Cofrade, han querido rememorar la estrecha vinculación entre la localidad de Montilla y Jesús del Calvario que, según reza un exvoto, salvó a los montillanos de la epidemia amarilla en 1805 tras haberse encomendado a la milagrosa imagen de Montalbán.
Año tras año, numerosos montillanos peregrinan en la noche de la Transfiguración del Señor hasta la Ermita de Jesús del Calvario y, en esta ocasión, Montilla Cofrade, junto a las hermandades de Jesús Nazareno y de la Humildad, han organizado una actividad para facilitar la realización de este camino en hermandad.
Desde el portal de información cofrade han querido agradecer públicamente a ambas hermandades su "total predisposición", así como a Mundaventos por la cesión de material; a AMT Laser por la realización de unos recuerdos para los asistentes; a Viajes Realia Tour por el servicio de autobús; "al Ayuntamiento de Montilla por su completa predisposición con el desarrollo de la actividad y, cómo no, a la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Calvario por recibir con los brazos abiertos a la delegación montillana".
Una imagen muy venerada
Aunque no hay datos exactos sobre la fecha en la que la imagen de Nuestro Padre Jesús del Calvario llegó a Montalbán de Córdoba, lo que es seguro es que lleva más de cuatro siglos recibiendo culto en el municipio ajero y melonero por excelencia.
Según los datos que maneja la propia hermandad, que no se constituyó hasta el año 1776, la imagen pudo recalaren Montalbán entre 1590 y 1600, un siglo antes de la edificación de la primera Ermita del Calvario en el paraje de Las Chorreras. Sin embargo, el empleo de materiales de escasa calidad durante su construcción llevaron al templo a un estado ruinoso, lo que obligó a planificar un nuevo lugar de culto.
De este modo, el 8 de septiembre de 1776 se inauguró la segunda ermita, que tampoco corrió mejor suerte que la anterior. No en vano, a finales de marzo de 1852, tanto la linterna como la cúpula del templo se desplomaron, por lo que se decidió demoler por completo el edificio y reedificarlo desde los cimientos, concluyendo las obras en julio de 1856.
La imagen de Jesús del Calvario se ubicó en su nueva ermita el 25 de agosto de 1856, en una jornada festiva en la que no faltaron los repiques de campanas, los arcos triunfales, las colgaduras en los edificios e, incluso, una iluminación especial que engalanó buena parte de la localidad.
El Señor de la Campiña es una imagen anónima, de tamaño natural y talla completa, que cuenta con brazos articulados. Sus facciones góticas hacen pensar que cuenta con una mayor antigüedad que el resto de imágenes nazarenas de la comarca, aunque la hermandad sitúa su hechura en el último tercio del siglo XVI.
ÁLVARO CARRASCO / J.P. BELLIDO
FOTOGRAFÍAS: MONTILLA COFRADE
FOTOGRAFÍAS: MONTILLA COFRADE