Los días grises y monótonos que marcaron los primeros meses de la pandemia fueron, para algunos, fuentes de inspiración y una época especialmente creativa. Es el caso del maestro Antonio Herrador y el periodista Francisco Moreno, ambos jubilados, responsables de Entremeses gamberros, una obra que, haciendo honor a su título, busca arrancar la sonrisa y carcajada desde la cotidianeidad.
Formado por cuatro textos, dos por cada uno de sus autores, Entremeses gamberros se caracteriza por –tal y como apunta la edil María Luisa Rodas en el prólogo de esta publicación– un humor "inteligente, sin caer en el chiste fácil, que al tiempo es capaz de hacer reflexionar sobre el tema que se va a tratar".
"El título del libro son dos conceptos que maridan, como se dice en ahora en el mundo del vino, muy bien. Son cuatro obras, dos de ellas monólogos, que se alejan de la temática habitual que se ha hace en Montilla y que, en mi caso y como dice mi nuestra amiga María Luisa Rodas, tiene un marcado humor inglés", destacó Francisco Moreno, sobre un trabajo en el que, desde el principio, cada uno de los autores plasma su propio estilo.
De este modo, mientras que Francisco Moreno reconoce que su aportación a Entremeses gamberros –'Hakim y Klitorinina y Animal de compañía– son fruto de 'teatralizar' algunos trabajos e ideas previos ex profeso, en el caso de Antonio Herrador, sus monólogos –Paraguas gabacho y El medallista– nacen de la necesidad de disfrutar de la escritura durante los meses más duros de la pandemia.
Así, este libro pretende ser un oasis de humor para el lector, aunque como apuntan sus autores, puede ser "chocante" pues "somos incapaces de escribir de forma académica y prosaica". Cuatro obras "cargadas del sentido sinvergüenza sin rayar en el mal gusto", como llega a destacar Rodas en el prólogo y que, en el caso de Antonio Herrador están marcados por la crítica social, mientras que las líneas de Francisco Moreno se caracterizan por su "tono surrealista".
Formado por cuatro textos, dos por cada uno de sus autores, Entremeses gamberros se caracteriza por –tal y como apunta la edil María Luisa Rodas en el prólogo de esta publicación– un humor "inteligente, sin caer en el chiste fácil, que al tiempo es capaz de hacer reflexionar sobre el tema que se va a tratar".
"El título del libro son dos conceptos que maridan, como se dice en ahora en el mundo del vino, muy bien. Son cuatro obras, dos de ellas monólogos, que se alejan de la temática habitual que se ha hace en Montilla y que, en mi caso y como dice mi nuestra amiga María Luisa Rodas, tiene un marcado humor inglés", destacó Francisco Moreno, sobre un trabajo en el que, desde el principio, cada uno de los autores plasma su propio estilo.
De este modo, mientras que Francisco Moreno reconoce que su aportación a Entremeses gamberros –'Hakim y Klitorinina y Animal de compañía– son fruto de 'teatralizar' algunos trabajos e ideas previos ex profeso, en el caso de Antonio Herrador, sus monólogos –Paraguas gabacho y El medallista– nacen de la necesidad de disfrutar de la escritura durante los meses más duros de la pandemia.
Así, este libro pretende ser un oasis de humor para el lector, aunque como apuntan sus autores, puede ser "chocante" pues "somos incapaces de escribir de forma académica y prosaica". Cuatro obras "cargadas del sentido sinvergüenza sin rayar en el mal gusto", como llega a destacar Rodas en el prólogo y que, en el caso de Antonio Herrador están marcados por la crítica social, mientras que las líneas de Francisco Moreno se caracterizan por su "tono surrealista".
Maquetado por Miguel Lucena Ponferrada, y con una obra del Teatro Garnelo de José Manuel Márquez Repiso para ilustrar la cubierta, la primera edición de Entremeses gamberros está disponible en las papelerías La Administración y La Avenida II.
I. TÉLLEZ / REDACCIÓN
