La Fundación Biblioteca Manuel Ruiz Luque ha elegido la Historia de la M. N. L. Ciudad de Montilla de Francisco de Borja Lorenzo Muñoz Ruiz como protagonista de El Libro del Mes, un proyecto puesto en marcha el pasado año, coincidiendo con la celebración del Día Internacional del Libro, con el objetivo de dar a conocer, a través de la página web de la entidad, aspectos singulares de algunos de sus títulos más selectos o extraños.
En esta ocasión, la institución montillana ha querido recuperar un singular texto que forma parte de su amplia colección con los primeros manuscritos en torno a Montilla a partir de los años centrales del siglo XVIII, piezas únicas que, al permanecer inéditas, despiertan un gran interés y presentan una considerable riqueza documental.
Aunque Francisco de Borja Muñoz Ruiz –del que se conocen pocos datos biográficos– concede a su obra el título genérico de Historia de Montilla, el contenido de este manuscrito queda lejos de ofrecer una síntesis de sus anales, centrándose en aspectos como la identificación de Ulia con Montilla, junto con la conquista de Fernando III, y un recorrido por los distintos edificios religiosos de la ciudad.
La redacción de esta obra comenzó el 21 de marzo de 1775, y en ella Muñoz Ruiz pretende manifestar la nobleza y temprana cristianización de Montilla. En este sentido, Historia de la M. N. L. Ciudad de Montilla sitúa el origen de la localidad en la antigua Ulia, como defendió Lucas Jurado Aguilar, apelando a las mismas fuentes documentales que el autor citado.
Asimismo, este manuscrito recoge un amplio catálogo de las distintas construcciones religiosas que existieron en Montilla en los últimos años del siglo XVIII. En el recorrido, Francisco de Borja se esmera en realizar minuciosas descripciones de sus templos con sus respectivas capillas y devociones, además de los distintos conventos y ermitas, reparando fundamentalmente en el origen que tuvieron.
"De gran interés es, asimismo, la información que ofrece sobre la configuración urbana de Montilla en los últimos años del siglo XVIII: sus calles y barrios, edificios civiles y espacios públicos. A diferencia de los capítulos anteriores, en estas páginas el autor se aleja de las fuentes no comprobadas, optando por aplicar una renovada metodología basada en la observación directa, que es complementada con búsquedas obtenidas en distintos archivos eclesiásticos y de protocolo", explica la directora de la Fundación, Elena Bellido.
Una parte "más personal" de la obra en la que, según apuntó Bellido, Muñoz Ruiz manifiesta sus inquietudes ilustradas como se advierte al resaltar las instituciones asistenciales o en considerar la limpieza y la falta de abastecimiento de agua en el casco urbano, a la vez que aporta un destacado interés al desplegar información de primera mano sobre numerosos edificios y obras artísticas que, con el paso del tiempo, han desaparecido.
En esta ocasión, la institución montillana ha querido recuperar un singular texto que forma parte de su amplia colección con los primeros manuscritos en torno a Montilla a partir de los años centrales del siglo XVIII, piezas únicas que, al permanecer inéditas, despiertan un gran interés y presentan una considerable riqueza documental.
Aunque Francisco de Borja Muñoz Ruiz –del que se conocen pocos datos biográficos– concede a su obra el título genérico de Historia de Montilla, el contenido de este manuscrito queda lejos de ofrecer una síntesis de sus anales, centrándose en aspectos como la identificación de Ulia con Montilla, junto con la conquista de Fernando III, y un recorrido por los distintos edificios religiosos de la ciudad.
La redacción de esta obra comenzó el 21 de marzo de 1775, y en ella Muñoz Ruiz pretende manifestar la nobleza y temprana cristianización de Montilla. En este sentido, Historia de la M. N. L. Ciudad de Montilla sitúa el origen de la localidad en la antigua Ulia, como defendió Lucas Jurado Aguilar, apelando a las mismas fuentes documentales que el autor citado.
Asimismo, este manuscrito recoge un amplio catálogo de las distintas construcciones religiosas que existieron en Montilla en los últimos años del siglo XVIII. En el recorrido, Francisco de Borja se esmera en realizar minuciosas descripciones de sus templos con sus respectivas capillas y devociones, además de los distintos conventos y ermitas, reparando fundamentalmente en el origen que tuvieron.
"De gran interés es, asimismo, la información que ofrece sobre la configuración urbana de Montilla en los últimos años del siglo XVIII: sus calles y barrios, edificios civiles y espacios públicos. A diferencia de los capítulos anteriores, en estas páginas el autor se aleja de las fuentes no comprobadas, optando por aplicar una renovada metodología basada en la observación directa, que es complementada con búsquedas obtenidas en distintos archivos eclesiásticos y de protocolo", explica la directora de la Fundación, Elena Bellido.
Una parte "más personal" de la obra en la que, según apuntó Bellido, Muñoz Ruiz manifiesta sus inquietudes ilustradas como se advierte al resaltar las instituciones asistenciales o en considerar la limpieza y la falta de abastecimiento de agua en el casco urbano, a la vez que aporta un destacado interés al desplegar información de primera mano sobre numerosos edificios y obras artísticas que, con el paso del tiempo, han desaparecido.
"Este hecho convierte a este libro manuscrito en una fuente que, pese a sus limitaciones, es imprescindible para el estudio de la historia de Montilla", aseveró la directora de la Fundación Biblioteca Manuel Ruiz Luque.
I. TÉLLEZ / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
