El Ayuntamiento de Montilla ha iniciado esta semana las actuaciones dirigidas a acabar con el problema de oxidación y de deterioro de la carpintería exterior de la piscina cubierta, unas deficiencias que registraban estas instalaciones deportivas pocos meses después del inicio de su actividad. Las obras, que se desarrollarán a lo largo de tres semanas, implicarán, además, la limpieza del óxido existente en la estructura.

La teniente de alcalde de Urbanismo, Alicia Carmona, explico ayer que la intervención pretende dar una "solución definitiva" a los problemas registrados en los cerramientos de la piscina, que obligaron al Ayuntamiento de Montilla a iniciar un proceso judicial contra la empresa constructora y contra el arquitecto que dirigió las obras por las "deficiencias evidentes que existían desde el primer día", en palabras de la edil.
"A lo largo de muchos años ha habido un proceso judicial, que finalizó en 2013, dando lugar a una indemnización al Ayuntamiento del arquitecto y de la constructora como partes responsables de la situación de la cubierta, con cerca de 38.000 euros, que fue la cantidad estimada por los peritos judiciales", explicó Alicia Carmona, para añadir que "el Ayuntamiento se ha visto en la responsabilidad de acometer estas obras para darle punto final a este problema".
La intervención, que está siendo desarrollada por la empresa montillana A y E Fachadas Especiales, supondrá una inversión de 60.500 euros, procedentes de los remanentes de las obras en la Corredera. En concreto, la actuación se centrará en la sustitución por completo de la carpintería exterior por una nueva de PVC para evitar su oxidación, así como la instalación de vidrio seco de doble acristalamiento, específico para este tipo de edificios, lo que, en principio, evitará que las lunas se partan con la asiduidad de las anteriores.
"Parte de estas ventanas serán practicables, es decir, que se podrán abrir y, de esta forma, evitar las condensaciones de vapor de agua que actualmente se registran en la piscina", remarcó la teniente de alcalde de Urbanismo, quien destacó, asimismo, que se actuará en la limpieza de la estructura, también afectada por el óxido.
En este sentido, la edil recordó que las instalaciones se mantendrán abiertas durante el desarrollo de los trabajos, sin que éstos afecten a los usuarios, gracias al trabajo de coordinación realizado con el Servicio Municipal de Deportes. "Se va a aprovechar la Semana Santa para acometer el grueso de la intervención, ya que en estas fechas los programas de nado se interrumpen habitualmente", explicó la delegada de Urbanismo, quien puntualizó que, además, se realizarán en estos días labores de mantenimiento por parte del personal técnico de Deportes.

La teniente de alcalde de Urbanismo, Alicia Carmona, explico ayer que la intervención pretende dar una "solución definitiva" a los problemas registrados en los cerramientos de la piscina, que obligaron al Ayuntamiento de Montilla a iniciar un proceso judicial contra la empresa constructora y contra el arquitecto que dirigió las obras por las "deficiencias evidentes que existían desde el primer día", en palabras de la edil.
"A lo largo de muchos años ha habido un proceso judicial, que finalizó en 2013, dando lugar a una indemnización al Ayuntamiento del arquitecto y de la constructora como partes responsables de la situación de la cubierta, con cerca de 38.000 euros, que fue la cantidad estimada por los peritos judiciales", explicó Alicia Carmona, para añadir que "el Ayuntamiento se ha visto en la responsabilidad de acometer estas obras para darle punto final a este problema".
La intervención, que está siendo desarrollada por la empresa montillana A y E Fachadas Especiales, supondrá una inversión de 60.500 euros, procedentes de los remanentes de las obras en la Corredera. En concreto, la actuación se centrará en la sustitución por completo de la carpintería exterior por una nueva de PVC para evitar su oxidación, así como la instalación de vidrio seco de doble acristalamiento, específico para este tipo de edificios, lo que, en principio, evitará que las lunas se partan con la asiduidad de las anteriores.
"Parte de estas ventanas serán practicables, es decir, que se podrán abrir y, de esta forma, evitar las condensaciones de vapor de agua que actualmente se registran en la piscina", remarcó la teniente de alcalde de Urbanismo, quien destacó, asimismo, que se actuará en la limpieza de la estructura, también afectada por el óxido.
En este sentido, la edil recordó que las instalaciones se mantendrán abiertas durante el desarrollo de los trabajos, sin que éstos afecten a los usuarios, gracias al trabajo de coordinación realizado con el Servicio Municipal de Deportes. "Se va a aprovechar la Semana Santa para acometer el grueso de la intervención, ya que en estas fechas los programas de nado se interrumpen habitualmente", explicó la delegada de Urbanismo, quien puntualizó que, además, se realizarán en estos días labores de mantenimiento por parte del personal técnico de Deportes.
I. TÉLLEZ / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: I. TÉLLEZ
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