El deficiente estado de conservación que presentan desde hace años los conocidos como "Pisos de los Maestros", situados en la calle Arrumbadores, entre el Centro de Participación Activa de Mayores y el Centro de Educación Permanente "Antonio Gala", ha llevado al equipo de gobierno a defender una "solución global" que favorezca la rehabilitación de las viviendas y que, además, garantice un proceso regulado para su adjudicación.
A preguntas del Grupo Municipal del Partido Popular, el teniente de alcalde de Bienestar Social, Francisco Lucena, explicó que con el reciente tapiado de uno de los pisos se pretende evitar que se ocupe ilegalmente una vivienda que no cumple con las condiciones mínimas de habitabilidad.
"Estos pisos no son viviendas sociales y, de hecho, en el Plan Municipal de Vivienda están recogidos como infraviviendas, ya que no cumplen con las condiciones necesarias", aseguró el edil, quien confirmó que la intención del equipo de gobierno es estudiar una "solución global" que permita acabar con una situación que se mantiene desde hace más de dos décadas.
En este sentido, el responsable del Área de Bienestar Social indicó que, junto a la rehabilitación de las diferentes viviendas que conforman el bloque situado a escasos metros de la Avenida de Boucau, será necesario "analizar el proceso de adjudicación que sea oportuno".
"Debemos evitar que entren en las viviendas dando una patada en la puerta, como ha ocurrido hasta ahora", reconoció Francisco Lucena, quien añadió que el reciente tapiado de uno de los pisos –cuyo último inquilino falleció hace unos días por causas naturales– no es más que una "medida de urgencia" para evitar que accedieran al interior del inmueble otras personas "que ya estaban esperando en la puerta para ocupar el piso".
Por todo ello, desde el equipo de gobierno insisten en la necesidad de actuar en la rehabilitación de este bloque de viviendas y dar así "una solución global" antes de su adjudicación. "Es un objetivo que no es fácil, pero se debe actuar antes de que entren más inquilinos", reconoció Lucena.
Asimismo, el teniente de alcalde de Bienestar Social recordó que a través del Plan Municipal de Vivienda y Suelo –que se encuentra en fase de aprobación inicial–, el Ayuntamiento podrá definir, impulsar y coordinar las políticas municipales en materia de vivienda y de rehabilitación, en coordinación con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), aprobado recientemente, y con el Plan Andaluz de Vivienda, que se mantendrá en vigor hasta el año 2020.
Tal y como recoge la historiadora Pepa Polonio en su obra Evolución urbana y vivienda obrera en Montilla (1900-1975), cuando se construyeron los Pisos de los Maestros en 1965 estaban aislados, "en mitad de un descampado", pero ofrecían "una salida" al problema que se planteaba a los profesionales del Magisterio "con sus exiguos sueldos y sus traslados constantes". Con el paso de los años, el bloque se fue degradando y, en la actualidad, presenta algunos problemas estructurales.
A preguntas del Grupo Municipal del Partido Popular, el teniente de alcalde de Bienestar Social, Francisco Lucena, explicó que con el reciente tapiado de uno de los pisos se pretende evitar que se ocupe ilegalmente una vivienda que no cumple con las condiciones mínimas de habitabilidad.
"Estos pisos no son viviendas sociales y, de hecho, en el Plan Municipal de Vivienda están recogidos como infraviviendas, ya que no cumplen con las condiciones necesarias", aseguró el edil, quien confirmó que la intención del equipo de gobierno es estudiar una "solución global" que permita acabar con una situación que se mantiene desde hace más de dos décadas.
En este sentido, el responsable del Área de Bienestar Social indicó que, junto a la rehabilitación de las diferentes viviendas que conforman el bloque situado a escasos metros de la Avenida de Boucau, será necesario "analizar el proceso de adjudicación que sea oportuno".
"Debemos evitar que entren en las viviendas dando una patada en la puerta, como ha ocurrido hasta ahora", reconoció Francisco Lucena, quien añadió que el reciente tapiado de uno de los pisos –cuyo último inquilino falleció hace unos días por causas naturales– no es más que una "medida de urgencia" para evitar que accedieran al interior del inmueble otras personas "que ya estaban esperando en la puerta para ocupar el piso".
Por todo ello, desde el equipo de gobierno insisten en la necesidad de actuar en la rehabilitación de este bloque de viviendas y dar así "una solución global" antes de su adjudicación. "Es un objetivo que no es fácil, pero se debe actuar antes de que entren más inquilinos", reconoció Lucena.
Asimismo, el teniente de alcalde de Bienestar Social recordó que a través del Plan Municipal de Vivienda y Suelo –que se encuentra en fase de aprobación inicial–, el Ayuntamiento podrá definir, impulsar y coordinar las políticas municipales en materia de vivienda y de rehabilitación, en coordinación con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), aprobado recientemente, y con el Plan Andaluz de Vivienda, que se mantendrá en vigor hasta el año 2020.
Tal y como recoge la historiadora Pepa Polonio en su obra Evolución urbana y vivienda obrera en Montilla (1900-1975), cuando se construyeron los Pisos de los Maestros en 1965 estaban aislados, "en mitad de un descampado", pero ofrecían "una salida" al problema que se planteaba a los profesionales del Magisterio "con sus exiguos sueldos y sus traslados constantes". Con el paso de los años, el bloque se fue degradando y, en la actualidad, presenta algunos problemas estructurales.
I. TÉLLEZ / J.P. BELLIDO
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
