Apenas unas horas después de que el Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (PACMA) denunciara que "el control de palomas que está practicando el Ayuntamiento de Montilla en diferentes puntos de la ciudad es un claro caso de maltrato animal y de extrema crueldad con los animales", la Delegación de Servicios, Obras Públicas, Medio Ambiente y Agricultura ha hecho público un comunicado en el que rechaza estas acusaciones y desmiente algunas de las afirmaciones hechas públicas en la tarde de ayer por la organización ecologista, que fueron avanzadas en primicia por Montilla Digital.
De este modo, el 30 de enero de 2015, el Consistorio montillano suscribió un contrato de prestación de servicios con una empresa especializada en el control de plagas urbanas para llevar a cabo el seguimiento, control, censo y reducción de la superpoblación de palomas en el casco urbano de Montilla.
"El objetivo de dicho servicio no es otro que el de velar por la salubridad pública y el bienestar de los ciudadanos, así como proteger los edificios, públicos y privados, de los deterioros que ocasiona la superpoblación de esta especie", explica el comunicado hecho público hace unos minutos por el Ayuntamiento de Montilla.
En contra de las declaraciones realizadas ayer por Javier Luna, coordinador del PACMA, la Delegación de Servicios, Obras Públicas, Medio Ambiente y Agricultura recuerda que una de las condiciones que establece el contrato suscrito con la empresa que presta el servicio de control de plagas es que los sistemas de captura sean "eficaces y, al mismo tiempo, respetuosos con las aves capturadas".
En ese sentido, el pliego de condiciones redactado por el propio Ayuntamiento de Montilla para contratar a esta empresa establece la necesidad de que las palomas dispongan de alimento y de agua suficiente en las jaulas-trampa que se utilizan para su captura. A su vez, las estructuras metálicas deben contar con una base plástica que sirva de aislante y proteja a las aves de los cambios de temperatura.
"Según el protocolo de actuación establecido y confirmado por la empresa que realiza el servicio, en los diferentes puntos estratégicos donde la población de palomas silvestres es mayor, las jaulas dispuestas se revisan cada lunes, miércoles y viernes, retirándose en esos días los animales capturados y siendo entregados a un gestor para su posterior eutanasia, según la normativa vigente", ha precisado el Consistorio.
En su respuesta a PACMA, el Ayuntamiento de Montilla sostiene que tanto la renovada gestión del Refugio de Animales Abandonados –que pasó a manos de Dejan Huella– como la puesta en marcha del programa CES para el control de colonias felinas en la localidad representan una "buena muestra de la sensibilidad que este equipo de gobierno tiene con el bienestar animal".
No obstante, desde el Consistorio montillano reconocen que el sistema de reducción de la sobrepoblación de palomas "está sujeto a propuestas de mejora que puedan plantearse y que demuestren su efectividad y especificidad, siempre que tales propuestas contemplen el respeto escrupuloso a la legislación vigente y tengan como principio prioritario la protección y defensa de la salud pública".
En este sentido, y a petición del representante legal del PACMA, desde la Delegación de Servicios, Obras Públicas, Medio Ambiente y Agricultura se ha concertado una reunión con este colectivo a fin de facilitarles información sobre la legislación aplicable, así como sobre el modelo de gestión que el Ayuntamiento está llevando a cabo en esta materia y, de este modo, poder valorar otras alternativas que pudieran plantearse.
En cualquier caso, el Ayuntamiento de Montilla ha rechazado "tajantemente" la acusación de PACMA de incumplir la Ley 11/2003 de Protección de los Animales en Andalucía y la Ley 8/2003 de la Flora y la Fauna Silvestre. "Nos hemos ajustado en todo momento a la legalidad vigente y hemos dado respuesta a las demandas de numerosos ciudadanos que sufren las molestias causadas por esta plaga urbana", sostiene el comunicado.
De este modo, el 30 de enero de 2015, el Consistorio montillano suscribió un contrato de prestación de servicios con una empresa especializada en el control de plagas urbanas para llevar a cabo el seguimiento, control, censo y reducción de la superpoblación de palomas en el casco urbano de Montilla.
"El objetivo de dicho servicio no es otro que el de velar por la salubridad pública y el bienestar de los ciudadanos, así como proteger los edificios, públicos y privados, de los deterioros que ocasiona la superpoblación de esta especie", explica el comunicado hecho público hace unos minutos por el Ayuntamiento de Montilla.
En contra de las declaraciones realizadas ayer por Javier Luna, coordinador del PACMA, la Delegación de Servicios, Obras Públicas, Medio Ambiente y Agricultura recuerda que una de las condiciones que establece el contrato suscrito con la empresa que presta el servicio de control de plagas es que los sistemas de captura sean "eficaces y, al mismo tiempo, respetuosos con las aves capturadas".
En ese sentido, el pliego de condiciones redactado por el propio Ayuntamiento de Montilla para contratar a esta empresa establece la necesidad de que las palomas dispongan de alimento y de agua suficiente en las jaulas-trampa que se utilizan para su captura. A su vez, las estructuras metálicas deben contar con una base plástica que sirva de aislante y proteja a las aves de los cambios de temperatura.
"Según el protocolo de actuación establecido y confirmado por la empresa que realiza el servicio, en los diferentes puntos estratégicos donde la población de palomas silvestres es mayor, las jaulas dispuestas se revisan cada lunes, miércoles y viernes, retirándose en esos días los animales capturados y siendo entregados a un gestor para su posterior eutanasia, según la normativa vigente", ha precisado el Consistorio.
En su respuesta a PACMA, el Ayuntamiento de Montilla sostiene que tanto la renovada gestión del Refugio de Animales Abandonados –que pasó a manos de Dejan Huella– como la puesta en marcha del programa CES para el control de colonias felinas en la localidad representan una "buena muestra de la sensibilidad que este equipo de gobierno tiene con el bienestar animal".
No obstante, desde el Consistorio montillano reconocen que el sistema de reducción de la sobrepoblación de palomas "está sujeto a propuestas de mejora que puedan plantearse y que demuestren su efectividad y especificidad, siempre que tales propuestas contemplen el respeto escrupuloso a la legislación vigente y tengan como principio prioritario la protección y defensa de la salud pública".
En este sentido, y a petición del representante legal del PACMA, desde la Delegación de Servicios, Obras Públicas, Medio Ambiente y Agricultura se ha concertado una reunión con este colectivo a fin de facilitarles información sobre la legislación aplicable, así como sobre el modelo de gestión que el Ayuntamiento está llevando a cabo en esta materia y, de este modo, poder valorar otras alternativas que pudieran plantearse.
En cualquier caso, el Ayuntamiento de Montilla ha rechazado "tajantemente" la acusación de PACMA de incumplir la Ley 11/2003 de Protección de los Animales en Andalucía y la Ley 8/2003 de la Flora y la Fauna Silvestre. "Nos hemos ajustado en todo momento a la legalidad vigente y hemos dado respuesta a las demandas de numerosos ciudadanos que sufren las molestias causadas por esta plaga urbana", sostiene el comunicado.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: J.P. BELLIDO
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