Discreto partido el que disputó el Juvenil Apedem ante el C.D. Egabrense el pasado domingo, cuyo resultado fue de empate a uno final y que, quizás, contentó más a los visitantes que a los locales, que se quedaron con un sabor amargo pese a las buenas sensaciones registradas entre los vinícolas en los primeros minutos jugados en el Estadio Municipal de Montilla.
Mejor no pudo empezar el encuentro para los vinícolas cuando en el segundo minuto de partido se puso por delante en el marcador. Juan Sánchez aprovechó un rechace del portero y remachó a gol justo cuando todavía algunos aficionados no habían ocupado su asiento, coincidiendo con el primer acercamiento de los amarillos.
Se presagiaba un partido fácil y cómodo por la prontitud del primer tanto, pero nada más lejos de la realidad ya que, entre el viento que afectaba a ambos equipos y los locales que iban de más a menos, transcurrió una primera parte poco vistosa y con muy poco fútbol por parte de ambos equipos en el municipal montillano.
Lo mejor del primer acto fue el marcador positivo para los montillanos, pero con muchas cosas que mejorar si querían acabar el encuentro con esa mínima ventaja. Al final de los primeros cuarenta y cinco minutos lo auriverdes se iban a la caseta con la tranquilidad del marcador a sabiendas que en la segunda parte el aire les favorecería, situación muy cómoda para afrontar la última parte del encuentro.
Comenzó la segunda parte y poco mejoró el equipo montillano. Las ocasiones eran escasas y, si cabe, más numerosas por parte de los egabrenses que intentaban hilvanar alguna jugada que les pudiera hacer empatar el encuentro. Los montillanos, por su parte, realizaban un juego más parecido a aguantar el resultado, siempre con el consiguiente peligro que eso conlleva, ya que realizaban acercamientos sin peligro alguno para el meta visitante David Gallardo.
La incertidumbre en el Estadio Municipal se hacía cada vez más evidente porque el equipo egabrense tampoco inquietaba la meta del portero Luija, hasta que un error en cadena de la defensa montillana hizo que a 10 minutos del final los rojinegros igualaran el marcador.
Corría el minuto 80 cuando Alejandro Castro, de tiro raso y bien dirigido desde la frontal, se alió con la fortuna para pasar la pelota por debajo de las piernas del defensor montillano y acabar entrando por la cepa del palo derecho del portero local. Se llegaba al empate a 1-1 en el marcador, que a la postre sería definitivo.
De ahí al final el encuentro se convirtió en un querer y no poder de los locales, y un fútbol demasiado estático se apoderó del juego para hacer que no hubiera más ocasiones de gol. Tan solo, y rozando ya las postrimerías del encuentro, un centro de Adrián Alguacil se envenena por el viento y se estampa en la escuadra del meta visitante, dando por terminado un mal encuentro planteado por los auriverdes.
Tendrá que buscar soluciones a los problemas de juego ocasionados en este encuentro el preparador vinícola, ya que el próximo encuentro oficial del Juvenil Apedem es en la vecina localidad de Montalbán de Córdoba para medirse a un C.D. Montalbeño que ya doblegó a los montillanos en el partido de ida por 0-1. Por tanto, un nuevo derbi –que tendrá lugar este sábado a las 19 de la tarde– en el que el Juvenil espera dar la sorpresa y llevarse los tres puntos al casillero amarillo.
Juvenil Apedem 1--1 C.D. Egabrense
Juvenil Apedem: Luis Javier Robles, Antonio Manuel Romero, Rafael Algaba, Antonio Trillo, Adrián Villegas, Francisco Jiménez, Juan Sánchez, Ezequiel Sojo, Manuel Castro, Alejandro Hierro y Francisco Espejo. También jugaron Carlos Repiso, Mario Albornoz, Miguel Ángel Naranjo, Emanuel Padure y Adrián Alguacil.
C.D. Egabrense: David Gallardo, Jesús Roldan, David Cuevas, Francisco Borrallo, Alejandro Bollero, Juan José Cuevas, Alejandro Osuna, Francisco Molina, José Antonio López, Alejandro Castro y Miguel Núñez. También jugaron Rafael Roldán, Juan Carlos Criado, Ramón Parejo y Francisco Ponferrada.
Goles: 1-0 Juan Sánchez (m.2); 1-1 Alejandro Castro (m.80)
Mejor no pudo empezar el encuentro para los vinícolas cuando en el segundo minuto de partido se puso por delante en el marcador. Juan Sánchez aprovechó un rechace del portero y remachó a gol justo cuando todavía algunos aficionados no habían ocupado su asiento, coincidiendo con el primer acercamiento de los amarillos.
Se presagiaba un partido fácil y cómodo por la prontitud del primer tanto, pero nada más lejos de la realidad ya que, entre el viento que afectaba a ambos equipos y los locales que iban de más a menos, transcurrió una primera parte poco vistosa y con muy poco fútbol por parte de ambos equipos en el municipal montillano.
Lo mejor del primer acto fue el marcador positivo para los montillanos, pero con muchas cosas que mejorar si querían acabar el encuentro con esa mínima ventaja. Al final de los primeros cuarenta y cinco minutos lo auriverdes se iban a la caseta con la tranquilidad del marcador a sabiendas que en la segunda parte el aire les favorecería, situación muy cómoda para afrontar la última parte del encuentro.
Comenzó la segunda parte y poco mejoró el equipo montillano. Las ocasiones eran escasas y, si cabe, más numerosas por parte de los egabrenses que intentaban hilvanar alguna jugada que les pudiera hacer empatar el encuentro. Los montillanos, por su parte, realizaban un juego más parecido a aguantar el resultado, siempre con el consiguiente peligro que eso conlleva, ya que realizaban acercamientos sin peligro alguno para el meta visitante David Gallardo.
La incertidumbre en el Estadio Municipal se hacía cada vez más evidente porque el equipo egabrense tampoco inquietaba la meta del portero Luija, hasta que un error en cadena de la defensa montillana hizo que a 10 minutos del final los rojinegros igualaran el marcador.
Corría el minuto 80 cuando Alejandro Castro, de tiro raso y bien dirigido desde la frontal, se alió con la fortuna para pasar la pelota por debajo de las piernas del defensor montillano y acabar entrando por la cepa del palo derecho del portero local. Se llegaba al empate a 1-1 en el marcador, que a la postre sería definitivo.
De ahí al final el encuentro se convirtió en un querer y no poder de los locales, y un fútbol demasiado estático se apoderó del juego para hacer que no hubiera más ocasiones de gol. Tan solo, y rozando ya las postrimerías del encuentro, un centro de Adrián Alguacil se envenena por el viento y se estampa en la escuadra del meta visitante, dando por terminado un mal encuentro planteado por los auriverdes.
Tendrá que buscar soluciones a los problemas de juego ocasionados en este encuentro el preparador vinícola, ya que el próximo encuentro oficial del Juvenil Apedem es en la vecina localidad de Montalbán de Córdoba para medirse a un C.D. Montalbeño que ya doblegó a los montillanos en el partido de ida por 0-1. Por tanto, un nuevo derbi –que tendrá lugar este sábado a las 19 de la tarde– en el que el Juvenil espera dar la sorpresa y llevarse los tres puntos al casillero amarillo.
Juvenil Apedem 1--1 C.D. Egabrense
Juvenil Apedem: Luis Javier Robles, Antonio Manuel Romero, Rafael Algaba, Antonio Trillo, Adrián Villegas, Francisco Jiménez, Juan Sánchez, Ezequiel Sojo, Manuel Castro, Alejandro Hierro y Francisco Espejo. También jugaron Carlos Repiso, Mario Albornoz, Miguel Ángel Naranjo, Emanuel Padure y Adrián Alguacil.
C.D. Egabrense: David Gallardo, Jesús Roldan, David Cuevas, Francisco Borrallo, Alejandro Bollero, Juan José Cuevas, Alejandro Osuna, Francisco Molina, José Antonio López, Alejandro Castro y Miguel Núñez. También jugaron Rafael Roldán, Juan Carlos Criado, Ramón Parejo y Francisco Ponferrada.
Goles: 1-0 Juan Sánchez (m.2); 1-1 Alejandro Castro (m.80)
PACO ALCAIDE / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: C.D. APEDEM MONTILLA
FOTOGRAFÍA: C.D. APEDEM MONTILLA
