La ermita de La Rosa ha sido cerrada al culto de forma provisional ante el riesgo de desprendimientos en su retablo mayor. Así lo ha confirmado esta mañana a Montilla Digital el párroco de Santiago Apóstol y rector de la Basílica de San Juan de Ávila, José Félix García, quien ha asegurado que el templo enclavado en la plaza de La Rosa permanecerá cerrado a los fieles hasta que los técnicos de Patrimonio del Obispado de Córdoba no evalúen los desperfectos que se han detectado en los últimos días en su retablo mayor, una obra rococó realizada en madera policromada a imitación de mármoles de colores que fue realizada en el último tercio del siglo XVII.
El pequeño templo ubicado junto al Teatro Garnelo fue construido por Cristóbal de Estepa sobre los cimientos de una vieja fábrica en el siglo XVII, gracias al patronazgo de Micaela Sánchez Ribera, esposa del contador ducal Diego Paéz Guerrero. En su hornacina central, el retablo mayor alberga la valiosa imagen de la Virgen de La Rosa, una obra barroca que el imaginero sevillano Pedro Duque Cornejo culminó en 1720. En el mismo retablo en el que ahora se han detectado algunos desperfectos también se encuentran las tallas de San Lorenzo Mártir y San Ramón Nonato.
Aunque los orígenes del pequeño templo de la plaza de La Rosa se remontan al siglo XVI, la ermita fue sometida a una profunda rehabilitación que concluyó en 1763 y en ella tiene radicada su sede canónica la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Preso y María Santísima de la Esperanza, que celebra su estación de penitencia en la tarde del Jueves Santo, tras el tradicional acto del Prendimiento.
Por eso, en los muros laterales del presbiterio y en el lado del Evangelio de la nave existen tres retablos del siglo XIX, labrados en yeso con parejas de pilastras acanaladas y frontón triangular en su culminación, que albergan las imágenes de la cofradía de Los Panciblancos: María Santísima de la Esperanza, Nuestro Padre Jesús Preso y el Santísimo Cristo Amarrado a la Columna, obra de Juan de Mesa El Mozo.
La cuarta de las imágenes que forman parte del cortejo del Jueves Santo, la de Jesús de la Oración del Huerto –una talla del siglo XVII, obra de Pedro Freila de Guevara– se sitúa en uno de los laterales de la ermita, concretamente en el retablo de San Francisco Javier, que proviene de la antigua iglesia de los Padres Jesuitas.
En declaraciones a este periódico, el párroco de Santiago Apóstol y rector de la Basílica de San Juan de Ávila se ha mostrado confiado en que la evaluación de los daños en el retablo mayor de la ermita se pueda llevar a cabo a la mayor brevedad posible por parte de los técnicos de Patrimonio del Obispado de Córdoba para que, de este modo, se puedan tomar las decisiones que correspondan para asegurar la integridad del templo.
El pequeño templo ubicado junto al Teatro Garnelo fue construido por Cristóbal de Estepa sobre los cimientos de una vieja fábrica en el siglo XVII, gracias al patronazgo de Micaela Sánchez Ribera, esposa del contador ducal Diego Paéz Guerrero. En su hornacina central, el retablo mayor alberga la valiosa imagen de la Virgen de La Rosa, una obra barroca que el imaginero sevillano Pedro Duque Cornejo culminó en 1720. En el mismo retablo en el que ahora se han detectado algunos desperfectos también se encuentran las tallas de San Lorenzo Mártir y San Ramón Nonato.
Aunque los orígenes del pequeño templo de la plaza de La Rosa se remontan al siglo XVI, la ermita fue sometida a una profunda rehabilitación que concluyó en 1763 y en ella tiene radicada su sede canónica la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Preso y María Santísima de la Esperanza, que celebra su estación de penitencia en la tarde del Jueves Santo, tras el tradicional acto del Prendimiento.
Por eso, en los muros laterales del presbiterio y en el lado del Evangelio de la nave existen tres retablos del siglo XIX, labrados en yeso con parejas de pilastras acanaladas y frontón triangular en su culminación, que albergan las imágenes de la cofradía de Los Panciblancos: María Santísima de la Esperanza, Nuestro Padre Jesús Preso y el Santísimo Cristo Amarrado a la Columna, obra de Juan de Mesa El Mozo.
La cuarta de las imágenes que forman parte del cortejo del Jueves Santo, la de Jesús de la Oración del Huerto –una talla del siglo XVII, obra de Pedro Freila de Guevara– se sitúa en uno de los laterales de la ermita, concretamente en el retablo de San Francisco Javier, que proviene de la antigua iglesia de los Padres Jesuitas.
En declaraciones a este periódico, el párroco de Santiago Apóstol y rector de la Basílica de San Juan de Ávila se ha mostrado confiado en que la evaluación de los daños en el retablo mayor de la ermita se pueda llevar a cabo a la mayor brevedad posible por parte de los técnicos de Patrimonio del Obispado de Córdoba para que, de este modo, se puedan tomar las decisiones que correspondan para asegurar la integridad del templo.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: J.P. BELLIDO
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